viernes, 1 de abril de 2011

SUPERACION ESPIRITUAL

Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios. Deuteronomio 28:13.

Alo largo de la historia humana ha habido miles de personas que lucharon por años con tenacidad y presteza para alcanzar una meta. Es bien sabido que para adquirir lo que realmente vale en esta vida, son sumamente necesarios el esfuerzo y el sacrificio.
Las metas a alcanzar dependen de cada persona y pueden ser de carácter económico, profesional, social, afectivo u otro. Detrás de los tremendos avances científicos que marcaron a la humanidad, como por ejemplo la informática, la navegación espacial, las comunicaciones, etc., hubo miles de horas de trabajo sacrificado y esmerado, para lograr lo que hoy conocemos.
Todo este impulso de superación personal y esfuerzo está genuinamente apoyado por Dios y su Palabra. A través de Moisés y como condición a la obediencia, la Biblia nos dice: "El Señor te pondrá en el primer lugar, y no en el último; siempre estarás por encima de los demás, y nunca por debajo, con lal que atiendas a los mandamientos del Señor tu Dios, que yo te ordeno hoy, y los pongas por práctica" (Deut. 28:13, Dios habla hoy), y estas bendiciones para la nación de Israel están también aseguradas para el Israel espiritual.
Dios está dispuesto a darnos la posibilidad de distinguirnos en todos los órdenes de la vida. Por lo tanto, es normal y lógico que deseemos la superación y nos superemos, siempre y cuando esa superación esté sujeta a la voluntad divina.
Por demás está decir que para llegar a concretar cualquier tipo de logro, la constancia, el espíritu de sacrificio, el tiempo empleado en el trabajo y otras cualidades que se asocian a la perseverancia, son necesarios e indispensables. No existe meta a alcanzar que no pida a cambio algún tipo de sacrificio o inversión.
Aunque a menudo se habla de la conducta apropiada del cristiano, pocas veces se nos anima a superarnos en la vida espiritual. Para que se realice esta superación, es necesario entregarle nuestra voluntad a Dios, ya que no hará vida sin que nosotros se lo permitamos.
A lo largo de este mes veremos diferentes conceptos bíblicos que te ayuda mi a tomar decisiones para que Dios te permita crecer espiritualmente, así Minio es normal crecer y superarse en todas las facetas de la vida. Si amas a Dios, también desearás superarte en tu vida espiritual. Comienza hoy pidiéndole al Señor que te permita ser "cabeza y no cola" en tu cristianismo diario.


Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuela

No hay comentarios:

Publicar un comentario