martes, 31 de mayo de 2011

UNA LUZ PERMANENTE

Aarón preparara las lámparas en la Tienda de reunión, fuera de la cortina del pacto, para que ardan delante del Señor toda la noche. (Levítico 24:3 NVI ).

La Biblia especifica las minuciosas y precisas instrucciones que dio Dios para el buen funcionamiento del tabernáculo. ¿Qué lecciones prácticas podemos extraer de los pasajes que hablan del candelero, para aplicarlas a nuestra vida como mujeres?
1. El candelero era un mueble importante en el tabernáculo. Me agrada pensar que Dios me considera importante en este mundo.
2. Debía permanecer siempre encendido. Las mujeres podemos, con la ayuda de Dios, mantener la lámpara del amor siempre encendida.
3. Tenía brazos que se extendían alumbrando todo el recinto. Nosotras podemos extender nuestros brazos de misericordia donde otros no llegan.
4. La luz de las lámparas del candelero se reflejaba en las tablas cubiertas de oro e se hallaban a ambos lados del edificio, mostrando así toda su belleza. Nuestra débil aunque poderosa luz puede mostrar a otros la hermosura que hay en la mirada de Jesús, el Salvador.
5. Ningún candelero tiene luz propia. Solo podemos alumbrar al mundo con la luz celestial.
Hay para ti, mujer, una importante y gloriosa misión. Tú puedes marcar la diferencia en la vida de los que te rodean. Tú puedes reflejar la luz dc Dios. Tu puedes llevar esperanza, paz, sosiego, confianza y amor a los que están perdidos.
Alguien expreso poéticamente: «Ya hay demasiado fango en el sendero, / no amontones más. / Es ingrata tarca el hacer resbalar a los demás. / Ya hay demasiado barro por la vida / para que tu eches más. / Se tú de los que aparten ese barro / para no salpicar a los demás. / Ya hay demasiadas sombras por el mundo, / ya no le pongas más, / Haz tu vida tan clara y luminosa / que evites tropezar a los demás, / Hay tanta podredumbre donde quiera / que no es justo que tú la aumentes más; / echa a andar tu pureza sin temores, / y entonces vivirás.
Vive cada día como un candelero del altar divino. Deja que Dios mantenga su luz en ti. No importa donde estés o lo que poseas, en las manos de Dios, eres una estrella.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

¿QUIÉN CONTROLARA TU MENTE?

Y no os acomodéis al mundo presente, antes bien transformaos mediante la renovación de vuestra mente, de forma que podáis distinguir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable, lo perfecto. Romanos 12:2 (Biblia de Jerusalén).

El enemigo de las almas está dispuesto a ganar el gran conflicto en tu vida. No hay momento, circunstancia o lugar en que puedas estar seguro. Si el vio que le entregaste tu corazón a Cristo, peleara y te seducirá para que abandones tu lucha y te apartes de la senda señalada por la Biblia.
Para lograr el control de tu vida, necesita dominar tu mente. A través de todo lo que te rodea te perseguirá a fin de que tu mente se doblegue y acepte lo malo por bueno, y tenga lo bueno por malo. Esto parece absurdo e ilógico, pero es real. Jesús anticipo esta confusión cuando dijo: "Y aún viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensara que rinde servicio a Dios. Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mi" (Juan 16:2, 3).
Los medios de diversión actuales, utilizados y manipulados por el enemigo, tienen el propósito de bombardearte con mensajes mundanos a fin de que termines aceptándolos. Mientras que Jesús te dice: cuida tu cuerpo, el enemigo te ofrece mil propagandas y ejemplos de hombres y mujeres de fama que mancillan su salud con vicios destructores. Cuando Jesús te dice: dedica tiempo a estudiar la Biblia y a orar, el enemigo te presenta programas de televisión adictivos, juegos electrónicos que demandan alto poder de concentración y películas sumamente violentas para que malgastes tu tiempo en lo que no aprovecha. Mientras que Jesús te dice: cuida tu sexualidad, Satanás te inducirá a mirar películas e introducirte a través de Internet en imágenes o actividades inmorales.
Mientras Jesús te invita a que te recrees con ejercicio físico, algún pasatiempo u otra actividad que te ayuda a obtener nuevas fuerzas para proseguir en la vida y crecer espiritualmente, su enemigo te seducirá para que busques placeres nocivos para tu salud física, mental y espiritual.
Hasta que el Señor vuelva, el príncipe del mal luchara para obtener el control de tu mente. El versículo de hoy es clave para que Jesús gane la batalla: "No os acomodéis al mundo presente". No te acostumbres, no te adormezcas, no tomes por "natural" todo lo que está a tu alcance como diversión. Más bien dedica tiempo a "la renovación de tu mente", y de esta manera podrás "distinguir cual es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable, lo perfecto".

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

OBRAS

El cual pagará a cada uno conforme a sus obras. Romanes 2:6.
Por algún motivo, muchos cristianos no entienden el lugar de las obras en la experiencia espiritual. Las obras no salvan a nadie. La Biblia enseña, con claridad meridiana, que la salvación es únicamente por la gracia maravillosa de Jesús. Este mensaje está presente desde el libro de Génesis, cuando un cordero, que simbolizaba a Jesús, era sacrificado a fin de resolver el problema de la desnudez humana; pasando por el pueblo de Israel, en que cada israelita tenía que ofrecer a Dios un corderito, como expiación por su pecado, hasta el libro de Apocalipsis, que termina diciendo: "La gracia del Señor este con todos vosotros".
Pero, el texto de hoy es también claro, al afirmar que el resultado final de la gracia son las buenas obras y que, finalmente, seremos juzgados por lo que hicimos o dejamos de hacer.
La gracia no está reñida con las obras; ambas tienen lugar en la experiencia de una persona que ha entregado su vida a Jesús. La gracia es la causa de la salvación; las obras, son su resultado. La confusión sucede cuando cambiamos los papeles, y pensamos que las obras nos califican para la salvación; o, ya que fuimos salvos en Cristo, no necesitamos preocuparnos por las obras.
La otra confusión surge cuando deseamos que las buenas obras sean el resultado de nuestro esfuerzo. Si para alguna cosa vale el esfuerzo humano, es para buscar a Jesús y mantener, con él, un compañerismo diario a través de la oración, el estudio de la Biblia y la testificación.
¿Por qué se necesita esfuerzo? Porque la naturaleza humana, que todavía cargamos, nos conduce lejos de Dios; no es natural que quiera vivir en comunión con Jesús.
Pero, el hecho de que no sea natural no significa que debas quedarte vegetando en el terreno de la mediocridad espiritual, y aceptes pasivamente una vida de derrotas espirituales.
La victoria es posible con Jesús. Por eso, el libro de Apocalipsis está repleto de promesas para los vencedores. La victoria no es una fantasía, ni una Utopía, ni algo reservado solo para quienes tienen gran fuerza de voluntad. La victoria es un presente de amor, que Jesús ofrece a los que, con humildad, lo buscan.
Haz de este día un día de victorias espirituales y de muchas obras, sabiendo que Dios "pagara a cada uno conforme a sus obras".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

lunes, 30 de mayo de 2011

¿QUIÉN SOY?

A los discípulos se les llamó cristianos por primera vez en Antioquía. (Hechos 11:26).

En las páginas de la vieja Biblia de mi madre está escrito este pensamiento: «Soy lo que soy, por ser quien soy; si dejara de ser quien soy, dejaría de ser lo que soy». Parece un trabalenguas, pero este juego de palabras encierra la esencia del cristianismo: «Soy diferente porque soy cristiana, si dejara de ser cristiana, me convertiría en una mujer más. Una del montón. ¡Soy especial, porque Cristo me hace especial!. ¿Te consideras especial? ¿Sientes que Cristo ha transformado tu vida?
Luxemburgo es un país situado entre Francia, Alemania y Bélgica. Aunque pudiera verse afectado por sus vecinos gigantes, ha sabido forjar una fuerte personalidad, paradigma fiel de su lema nacional: «Queremos seguir siendo lo que somos». Este coloso de la dignidad ha llegado a ser considerado uno de los países de mayor calidad de vida del mundo.
Somos propensas a caer en el vacío del fracaso que nos impide llegar a las alturas del triunfo. En este precipicio de la derrota se alzan las poderosas rejas que, como laberintos, intentan hacernos presa de la monotonía y el conformismo. Alii nuestro yo se eleva tanto que llegamos a creer que por nuestros propios méritos podemos ser grandes y poderosas, inexpugnables, pero cada paso que damos nos hunde más en el profundo mundo de la envidia, la arrogancia y la superioridad.
Aunque estas imponentes murallas se aleen a nuestro alrededor tratando de ahogarnos, nosotras podemos elevarnos hasta las alturas más sublimes si escribimos la historia como Luxemburgo. Atrévete a decir: «Quiero seguir siendo lo que soy; una mujer cristiana, una hija de Dios». Entonces nada ni nadie podrá opacar el brillo que emane de tu vida, porque serás un resplandor de la luz celestial. ¿Cuál es el secreto de la victoria? Asegurarse cada día de caminar con Jesús.
Disfruta de que te llamen cristiana. En Antioquia se llamó así a los que se parecían a Jesús. ¿Hay algo más hermoso que ser comparada con Jesús? Alza tu voz cada día y exclama: «Señor, yo quiero seguir siendo quien soy: tu hija».

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

LOS PASATIEMPOS MÁS SERIOS

A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad. Mateo 25:15.

Cuando apenas ingresaba a la adolescencia, por recomendación de mi madre, comencé a coleccionar estampillas de todo el mundo. Junto a un amigo, buscábamos cartas viejas en cajones de mesa de luz, baúles, y todos aquellos lugares que pudieran tener algún sobre para sacar sus estampillas. También recurrimos a filatelistas que vendían parte de sus colecciones, y así logramos engrosar notablemente nuestra propia colección. Lo hacíamos en los momentos libres, cuando no había nada que estudiar.
En algún momento llegue a pensar que tenía demasiadas estampillas, y hasta comencé a perder el interés por la filatelia. Pero luego conocí a Edgardo, un amigo que me sorprendió por la cantidad de estampillas que tenía su colección.
Un pasatiempo o "hobby" es una tarea u ocupación que se realiza únicamente por la satisfacción que produce. En el ejemplo de la filatelia, nadie me pagaba por coleccionar, clasificar y enumerar las estampillas. Simplemente lo hacía por placer, porque sentía que empleaba el tiempo en algo útil, aunque eso no me dejara ningún crédito económico.
Y así como existe el pasatiempo de la filatelia, existen cientos de pasatiempos que permiten a las personas buscar recreación en una labor que les produce placer. Mi esposa tiene como pasatiempo tejer, cocinar y cultivar una huerta. Nadie la obliga a tejer, ni a cocinar. Tampoco tenemos la necesidad de sembrar verduras y especias en una huerta; simplemente lo hace para sentirse bien.
Otros pasatiempos incluyen: armar modelos de aviones, helicópteros o automóviles, la carpintería, la mecánica, la soldadura eléctrica o la decoración, arreglar artefactos eléctricos y electrónicos, componer canciones, escribir, bordar, el corte y confección de ropa de vestir, hacer conservas, dibujar, etc.
¿Cuál es el propósito del pasatiempo? Recrear la mente y todo el ser por medio de una actividad que requiere cierto esfuerzo.
A todos los seres humanos Dios les dio talentos, habilidades y destrezas. Todos poseen un conjunto único de habilidades, y además pueden llegar a adquirir otros talentos con la práctica.
A tu edad es muy probable que seas un estudiante. Quizá ya trabajas o haces ambas cosas, y debes dedicar tiempo a recrearte en aquello que te gusta, que no implique ningún desgaste para tus fuerzas y tu intelecto, y te ayude a retomar con nuevo vigor las tareas de cada día. Si todavía no tienes un pasatiempo serio, considera la posibilidad de cultivar uno que te guste y tenga alguna utilidad.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

SÍGUEME

Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme. Juan 21:19.

Julio de 58 d.C. Roma esta en llamas. Se murmura, en la ciudad, que el autor del incendio es Nerón, pero se culpa a los cristianos; muchos de ellos, cubiertos de betún, son quemados vivos. Pedro corre una suerte diferente: a él lo crucifican cabeza abajo; por lo menos, eso afirma la tradición. Muerte heroica la de Pedro; diferente de aquel hombre cobarde, que juro no conocer al Maestro, la noche en que el Salvador del mundo fue crucificado.
Aquella noche amarga; la más triste de las noches tristes, la miseria del hombre había llegado a su expresión más audaz. Y, en medio de aquella tragedia, tal vez Pedro y Judas sean los emblemas de la manera en que el ser humano reacciona ante el sacrificio de Cristo.
Judas se suicidó; no fue capaz de resistir el peso de la culpa. Sus carnes fueron hechas pedazos por los perros, al día siguiente. Pedro también sintió el peso abrumador de la conciencia; el martilleo de la culpa lo golpeo sin piedad. Pero, el apóstol creyó en la promesa de perdón de Jesús, y lloro, arrepentido de su traición.
Ahora ya todo ha pasado. El sol aparece, sonriente, a la orilla del mar de Galilea, cuando el Señor se presenta a sus discípulos. Pedro no tiene siquiera el valor de levantar la mirada. ¿Qué decir? , ¿Cómo justificar que lo ha negado? Es Jesús quien toma la iniciativa. Gracias a Dios, siempre es Jesús el que parte en dirección del hombre caído. Es él el que busca, el que llama y, finalmente, encuentra al pecador.
Tú conoces bien la historia. Después de preguntarle tres veces si lo amaba, anuncia a Pedro el triste fin que lo espera, si desea seguirlo. Y el acepta. Ya no va al Maestro atraído por el Reino, por las luces o por las bendiciones; eso es asunto del pasado. Su motivación, ahora, es el amor. Y cuando el amor llena tu corazón, toma también posesión de tus ojos, de tu mente; en fin, de tu ser entero. Ya no ves las dificultades, los problemas ni las amenazas que te esperan. El amor te constriñe; te arropa en su manto y te hace avanzar seguro, en medio de la tormenta.
Si Pedro murió como la tradición describe, poco importa. Importa que mu-riera sirviendo a su Señor y testificando acerca de su amor. Por eso hoy, tu también sal a enfrentar las dificultades, recordando que "esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

domingo, 29 de mayo de 2011

UN CAMINO, UNA CORONA

Este es el camino, andad por él y no echéis a la mano derecha, ni tampoco os desviéis a la mano izquierda. (Isaías 30: 21),
5egun O. W. Holmes «lo más grande en este mundo no consiste en saber dónde estamos, sino en saber hacia qué objetivo avanzamos». No siempre resulta de nuestro agrado vivir, trabajar o estudiar en el lugar que nos ha tocado. He pensado a veces que si hubiera nacido en Asia, mi físico, mi cultura y mi familia serian diferentes pero de ningún modo esto sería la causa de mi desgracia o mi felicidad.
Siempre he creído que la felicidad no depende de las circunstancias, sino de la forma en que las manejo. Son muchos los que tratan de esconder su fracaso culpando a otros, pero la historia demuestra que. no es cl mundo el que impone los parámetros de la felicidad.
Ayer hablábamos de la libertad de elección. Aunque es cierto que nacemos bajo la maldición del pecado, no tenemos por qué confortarnos con sucumbir bajo el peso del mal, ya que el mismo Cristo abrió un puente de salvación, uniendo el cielo con la tierra, para que tú y ye tengamos una vía de escape. Su invariable amor sostiene nuestra sombra mostrándonos el camino y exhortándonos a andar por él. Pero, ¿qué camino?
Son muchos los que hicieron historia por caminos inexplorados. El famoso navegante Cristóbal Colón abrió un camino sobre las olas conquistando América en el año 1492. El cronista de Indias y conquistador español del siglo XVI, Bernal Díaz del Castillo, descubrió un camino literario en el que narró de manera épica la conquista de México y a la vez recogió la vida y costumbres del pueblo azteca. Y ha habido otros personajes que abrieron caminos importantes para la humanidad, pero ninguno como Cristo, el mayor de los conquistadores, el único que no solo puede mostrar el camino, sino que el mismo se convierte en el camino.
Escucha hoy su voz y no te desvíes ni a la derecha ni a la izquierda. Escoge el verdadero camino y anda por él. Si te paras en el umbral del camino que va al cielo, veras tu corona al final.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

LAS FIESTAS DE FIN DE AÑO

Separados de mi nada podéis hacer. Juan 15:5.

Aunque todavía faltan varios meses para las fiestas de fin de año, creo que dentro del tema de la "recreación o diversión" es necesario tratarlas. Para celebrar la Navidad y la llegada del nuevo año se hacen grandes preparativos, se acumula mucha comida, se organizan encuentros familiares y de amigos, se compran regales y se hacen largos viajes.
Todavía recuerdo como seguí a través de la televisión los festejos mundiales para despedir el año 1999 y recibir el 2000. De manera casi simultánea, la televisión satelital logro combinar los festejos de los países que poseen un gran poder económico y le mostro al mundo las geniales actividades planeadas para comenzar el nuevo milenio. A una escala mucho menor, muchas familias entran en enormes compromisos cada fin de año.
Las fiestas de fin de año, que debieran recordar la llegada de Jesús al mundo y producir en nosotros una expresión de gratitud por haber concluido un año y la posibilidad de comenzar otro, muchas veces son empleadas para comer en exceso, emborracharse y divertirse disipadamente. Lamentablemente, muchos cristianos se unen a los incrédulos para festejar como lo hacen estos, y olvidan que hay un Dios que los mira y los juzga. La Navidad y la llegada del nuevo año se transforman así en diversiones provistas por el enemigo para que los hombres deshonren a Dios con sus actos.
Cada vez que las Escrituras hablan de una fiesta, tienen una connotación religiosa. Las fiestas del Antiguo Testamento, las bodas o la dedicación de los niños, eran ocasiones en que se pedía la bendición divina sobre las personas o el pueblo.
En las próximas fiestas navideñas y de fin de año, permite que Jesús siga siendo el protagonista principal de tu vida. No acudamos a Dios solo cuando nos falta la salud, el trabajo o cuando hay problemas en el hogar o nos sintamos solos. Damos el primer lugar al Salvador también en las ocasiones festivas.
Jesús resumió la actividad de la vida cristiana con las siguientes palabras: "Separados de mi nada podéis hacer". Nunca, ni siquiera en las fiestas de fin de año, debemos separarnos de Jesús.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

EL SABE

Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Filipenses 4:19.

¿Has pensado, alguna vez, por qué tienes que orar contándole todo a Jesús, si el conoce bien lo que sucede contigo? La verdad, es que el propósito de la oración no es informarle nada a Dios: "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta", afirma el versículo de hoy. Entonces, ¿por qué hay que orar? El propósito de la oración es cultivar el compañerismo con Jesús, conversar con él, tomar consciencia de su presencia. Es como la experiencia de los novios, que se encuentran para conversar. ¿De que hablan? De todo y de nada. Lo que importa no es lo que dicen, sino el momento de compañerismo, el estar al lado de la persona amada.
Muchos creen que orar es simplemente pedir. ¿Ya imaginaste como seria la vida de dos personas enamoradas si solo se encontrasen para pedirse cosas? La tragedia del ser humano es que vive solo, intenta vencer solo, se atreve a alcanzar sus sueños... solo. Y el resultado es que se hiere, y hiere a las personas amadas que viven a su lado.
Jesús desea entrar en tu vida; formar parte de tus planes; luchar a tu lado para hacerlos realidad. Y el instrumento para permanecer a tu lado es la oración. No por causa suya, sino por tu causa. Eres tú el que necesita tener conciencia de que no estás solo. Saber que Jesús está contigo te infunde valor, determinación, optimismo, y la voluntad de levantarte y continuar luchando, a pesar de las circunstancias adversas que te puedan rodear.
En los tiempos de Jesús, los fariseos habían caído en el formalismo de una religión vacía. Creían que el simple cumplimiento de deberes y obligaciones les garantizaba la salvación. "Este pueblo de labios me honra, pero su corazón está lejos de mí", lamento el Señor, en aquella ocasión.
El corazón. ¡Esa es la clave de un cristianismo con significado! El corazón lleno de amor hacia Dios; el corazón que busca estar a su lado; el corazón que anhela el compañerismo permanente de Jesús.
Haz de este un día de compañerismo con el Señor. Mientras caminas, juegas, estudias, trabajas o lo que hagas, ten conciencia de que no estás solo. Conversa con el como si estuviese sentado a tu lado, mientras diriges tu vehículo. Y recuerda la oración de Pablo: "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

sábado, 28 de mayo de 2011

CUMPLIENDO EL PROPÓSITO

A esta mujer se le apareció el ángel deje Jehová y le dijo: ¿Tu eres estéril y nunca has tenido hijos, pero concebirás y darás a luz un hijo.(Jueces 13:3).
El comentario bíblico adventista hace esta interesante declaración: «Algunos de los hebreos más eminentes nacieron de madres que hasta entonces habían sido estériles. En un sentido muy especial, estos niños fueron dadivas de Dios, concedidos a sus padres, porque estos estaban enteramente consagrados al Señor, y los criarían de tal forma que pudieran llegar a ser instrumentos especiales del Señor para bien de su pueblo» (t. 2, p. 382).
Las páginas sagradas recogen muchos casos de hombres y mujeres que fueron dadivas de Dios. Sus padres fueron escogidos porque estaban preparados para asumir tal responsabilidad. Sin embargo, aunque todos cumplieron los planes divinos, no todos escogieron la voluntad divina para cumplir ese plan.
Dios siempre cumple lo que promete. ¿Por qué, entonces, se ve forzado a dar tantas vueltas para lograr su propósito en nuestras vidas? La respuesta está en la libertad de elección que dio al ser humano desde el mismo príncipe. Dios podría haberse ahorrado muchos sinsabores y sufrimientos si nos hubiera hecho como maquinas programadas para obedecerlo. Cuando pienso en lo que arriesgo sabiéndolo de antemano, me lleno de un agradecimiento enorme, porque sé que yo fui tan especial para el que asumió mi libertad.
Como madres tenemos el deber de educar a nuestros hijos en el camino de la salvación, pero debemos respetar la libertad que Dios les dio, aunque esto a veces lastime nuestro corazón. Lo cierto es que Dios nunca abandono a los buenos ni a los males. Isaac es un modelo para cualquier joven, sin embargo, su hijo Jacob mancho la historia inmaculada de su padre con mentiras, engaños y separación. José fue corona de rey en manos humildes y su fidelidad trajo felicidad. Y Sansón... Sansón es un ejemplo de cuan necio puede ser el ser humano a pesar de considerarse fuerte. Todos cumplieron su función en la vida, pero no todos tuvieron cl mismo final.
Recuerda que Dios abre un camino para que tu camines en él. Oremos para que no haya desvíos a derecha ni a izquierda. Dios siempre cumple sus propósitos. ¿Cumplo yo el propósito divino para mí?

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

VACACIONES

Si, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen. Apocalipsis 14:13.

¿Te gustan las vacaciones? ¿Esperas tener algunos días o semanas con actividades distintas a las que realizas durante el año? En la vida estudiantil, las vacaciones de verano son las más esperadas, porque además de extenderse varios meses, vienen después de un gran agotamiento físico e intelectual.
Todavía recuerdo cuanto esperaba las vacaciones en mis años de universidad. En las últimas semanas de clases, parecía que todos los profesores se ponían de acuerdo y teníamos que rendir exámenes diariamente, algunos días incluso nos tocaban más de uno. Además, cada profesor exigía como si su materia fuera la única de la carrera. Eso hacía que le quitáramos tiempo a los deportes, la vida social y el descanso nocturno para responder a todas las exigencias. ¡Cuántas preocupaciones y estrés!
Pero, como todas las cosas, en algún momento el año escolar terminaba y recibíamos nuestras notas. ¡Que alegría daba llegar al periodo de vacaciones! Por un periodo largo de tiempo nos olvidábamos de exámenes, trabajos prácticas y requisitos de lectura, y disfrutábamos de otras actividades predilectas. Personalmente, todos los veranos de mis años en la universidad tuve que colportar, y aunque no me agradaba demasiado la tarea, debo admitir que fueron momentos que disfrute junto a Jesús.
La vida cristiana en esta tierra también se asemeja a la vida estudiantil. Hay pruebas que nos preocupan, hay exigencias. Hay metas que alcanzar y objetivos que lograr. Hay momentos de mucha tensión, y para colmo, también hay sufrimientos, amarguras, tristezas y desconsuelo. Job, cuando vivía uno de los momentos más terribles de su vida, exclamo: "esta mi alma hastiada de mi vida" (Job 10:1), y muchos cristianos enfrentan experiencias similares.
La segunda venida de Cristo también merece ser anhelada. Todos los momentos difíciles que podamos vivir no significan nada comparados con el gran premio que Jesús nos está preparando. Y no creas que todo lo que haces es en vano y pasa desapercibido a los ojos divinos, porque el Señor conoce tus trabajos y tus luchas. Sabe cuánto esfuerzo le demanda a sus hijos sostenerse del lado de la verdad. Por eso promete en su Palabra: "Descansaran de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen".
Al salir a las actividades del día de hoy, no te desalientes si debes enfrentar problemas y luchas. Recuerda que Jesús te está esperando con unas preciosas vacaciones.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

CONTADOS

Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Mateo 10:30.

El dolor es como el viento en medio del desierto: sopla inclemente, castiga, duele; hace sufrir. Y, en esas horas, te sientes solo y abandonado. Es humano. Hasta el Señor Jesús, en la hora de dolor, pensó que su Padre lo había abandonado.
El otro día, converse con un jovencito de trece años de edad. Estaba desconectado de la vida. Tenía todo el futuro por delante, pero decía: "¿Qué futuro? A nadie le importa siquiera que existo". Lo decía, porque nunca había conocido a sus padres, y había sido criado por una amiga de la mamá.
Bueno, yo sé que hay momentos en que todo parece complicado y nos sentimos como hojas secas, arrastradas por el viento. Pero entonces, viene la afirmación de Jesús, registrada en el versículo de hoy. Aunque pienses que a nadie le importa tu existencia, a Jesús si le interesa, "pues aun tus cabellos están contados".
¿No es animadora la promesa divina? ¿A quién le importa un cabello? A nadie. Y ¿cuantos cabellos hay en las cabezas de todo el mundo? ¡Incontables! Nadie se daría el trabajo de contarlos. ¿Para qué? ¿Qué importancia tiene un cabello? Para Dios, mucha. Tanto es así que toma interés. ¿Y tú no vales más que un cabello?
Yo sé que este mundo es cruel. Más crueles somos los seres humanos que, cuando queremos hacer sentir insignificante a una persona, sabemos que decir y como decirlo. Pero, si tú eres una de esas personas heridas por la vida; si te sientes solo y abandonado; si crees que nadie te ama; si hay horas en que, al mirarte en el espejo de la vida, tú tampoco te aceptas. Si esto es así, piensa en la maravillosa figura que Jesús usa en el versículo de hoy para decirte que tú eres muy importante para él.
Tu valor no se mide por lo que tienes o por lo que eres, sino por lo que Dios piensa de ti. En casa de mis padres, hay un sombrero viejo y gastado por el tiempo. No vale nada. Cualquier persona que no conoce la historia podría echarlo a la basura; pero, para mis hermanos y para mí, aquel sombrero no tiene precio. Fue el sombrero de nuestro padre.
El valor de aquel sombrero no radica en el objeto en sí, sino en lo que ese viejo sombrero significa para nosotros.
Puede ser que ni tu ni yo valgamos nada en sí, pero tu valor reside en lo que significas para Jesús; y, para él, no tienes precio, como no lo tenía su sangre derramada en la cruz. Entonces, sal hoy, para enfrentar los desafíos del día, sabiendo que vales mucho, y que "aún tus cabellos están todos contados".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

viernes, 27 de mayo de 2011

PADRE MUESTRO

Mírame y ten misericordia de mi (Salmon 8:16).

Buscando algunos sinónimos de la palabra «mirar» pude percibir mejor el clamor del salmista. Lo que el estaba diciendo realmente era: «No me pierdas de vista, Señor, y ten misericordia de mi».
He participado en actividades donde se comprueba la agilidad visual de las personas. Se muestran varios objetos, como por ejemplo pinturas, en los que hay una serie de diferencias, y después de algunos segundos la persona tiene que recordar la mayor cantidad de cosas que haya visto y las diferencias que ha encontrado. Es interesante darse cuenta de que resulta casi imposible retener el cien por ciento de lodo lo que vemos. Bajo esa misma perspectiva, nos dirigimos a Dios pensando que tal vez haya dejado pasar por alto algo que debió haber visto. ¿Te has sentido así?
La célebre poetisa Gabriela Mistral recogió este humano sentir en las poéticas palabras que presento a continuación: «Padre nuestro que estas en los cielos, / ¿por qué te has olvidado de mí? / Te acordaste del fruto en febrero / al llegar su pulpa rubí».
¡Paradójica declaración! El Dios que miro la insignificante pulpa de rubí para que retoñara a su debido tiempo, no era capaz de mirar a su hija que sufría. ¿No te has sentido tu igual en algún momento de tu vida?
«Ha venido el cansancio infinito / a clavarse en mis ojos al fin, / el cansancio del día que muere / y del alba que habrá de venir. / El cansancio del cielo de otoño / y el cansancio del cielo de añil».
¡Que desesperada condición la del ser humano! Nacemos, vivimos bajo el sufrimiento y la enfermedad, y experiméntanos pocas alegrías, para finalmente dejar de existir.
¿Te sientes cansada, piensas que ya tu otoño anuncia el fin? Alza tu vista sedienta de luz celestial y encontraras los rayos del sol divino, que bañan tu rostro de paz. Aquella mujer que dejaba una estela de llanto y desesperación, termino esos mismos versos diciendo:
« Padre nuestro que estas en los cielos sea santo tu nombre hasta el fin».
La misericordia divina nunca te abandonara. El sigue siendo tu Padre.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

DESCANSAR CON JESÚS

Él les dijo: Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco. Porque eran muchos los que iban y venían, de manera que ni aun tenían tiempo para comer. Marcos 6:31.

La vida actual te lleva a andar "a mil por hora". Si quieres triunfar en la vida, si deseas obtener el éxito académico y profesional, tienes que esforzarte y trabajar duro. El esfuerzo en todas las áreas de la vida trae frutos abundantes de satisfacción y realización.
Pero, así como debes tener equilibrio en otras áreas de la vida, también debes tenerlo en el estudio y el trabajo. No tiene sentido trabajar y agotar tus fuerzas hasta enfermar la mente y el cuerpo, porque después no quedan energías para disfrutar el "premio". Es necesario esforzarse y entregarse por complete a la tarea asignada, pero también hay que separar tiempo para recrearse y descansar.
El Maestro de Galilea conocía las limitaciones humanas. Sus discípulos habían sido enviados de dos en dos para predicar las nuevas del reino. A las ciudades y aldeas que llegaron, instaron a que "los hombres se arrepintiesen. Y echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos, y los sanaban" (Mar. 6:12, 13).
Después de días de trabajo, los apóstoles llegaron con la alegría que produce el trabajo terminado. Con el gozo que solo Dios puede poner en el corazón, le contaron a Jesús "todo lo habían hecho, y lo que habían enseñado" (vers. 30). Con todo amor, el Salvador del mundo les dijo: "Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco. Porque eran muchos los que iban y venían, de manera que ni aun tenían tiempo para comer". ¡Que privilegio tuvieron los discípulos! Descansar con la presencia física de Jesús a su lado.
Es posible que tú también te sientas agotado y necesites reposar de tus actividades. Para eso no basta con dormir, tienes que descansar a los pies de Jesús. El Hijo de Dios exhorto a sus oyentes: "Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os hare descansar" (Mat. 11:28), y esa misma invitación se te extiende hoy a ti. Entrégale en oración al divino Maestro tu carga, tu agotamiento, tu estrés y tus preocupaciones, que él está dispuesto a darte las fuerzas que necesitas.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

EN SU MUERTE

Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucito de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva. Romanos 6:4.

¿Alguna vez imaginaste como te sentirías si de repente despiertas, y te descubres dentro de un ataúd, enterrado vivo? Bueno, un chino sobrevivió a su propia "muerte", después de ser enterrado, aún con vida, por equivocación, durante tres horas, informa el diario China Daily, del 28 de junio del año 2006. El siniestro suceso tuvo lugar en el condado de Tengxian, en una región del sur de China, cuando los médicos decretaron la "muerte" de Liang Jinshi, un enfermo diabético de cuarenta años.
El cuerpo de Liang fue enterrado pero, tres horas después de la ceremonia, su esposa acudió a la tumba, donde, en medio del silencio sepulcral, escucho la voz de su esposo. La mujer, asustada, aviso a los hermanos de Liang. El "cadáver" fue exhumado del ataúd y, para sorpresa y alegría de la familia, Liang seguía con vida. Los médicos señalaron que los arañazos en el ataúd demuestran que Liang permaneció vivo, en coma y con respiración; y no descartan que se trate de un caso de catalepsia.
La catalepsia es un estado neurológico patológico, en el que se suspenden las sensaciones y se inmoviliza el cuerpo; y ha provocado, a lo largo de la historia, el entierro de muchas personas aún con vida.
En el versículo de hoy, Pablo indica que, en el momento del bautismo, somos sepultados con Jesús. Pero, debemos tener cuidado de que realmente hemos muerto al pecado. Enterrar a una persona viva, tanto en la vida física como en la espiritual, puede resultar en tragedia.
El peor testimonio que puede haber, para denigrar la imagen del cristianismo, es una persona que nunca murió a la vida pasada, y "viste la camiseta" del cristianismo. Pero, el milagro de la conversión es un trabajo sobrenatural, que el Espíritu Santo realiza en la experiencia de las personas que se acercan a Jesús con fe.
Hoy puede ser ese día. Solo es necesario creer. La mente humana jamás será capaz de entenderlo pero, aunque no lo sientes ni lo entiendes, lo vives. Y esa vida se traduce en obras de amor hacia Dios y hacia los semejantes.
Entonces, hoy, antes de salir rumbo a las labores cotidianas, recuerda que: "Somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucito de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

jueves, 26 de mayo de 2011

UN MILAGRO INSUPERABLE

En esto se le acercó un leproso y se postro ante él, diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme. (Mateo 8:2).
En la actualidad las más terribles enfermedades son tratadas medicamente de tal manera que se evite al paciente cualquier dolor excesivo, pero en los tiempos bíblicos no era así. Las personas que padecían lepra no solo eran consideradas muertos en vida, sino que la crueldad con que eran tratadas dificultaba sus ya difíciles vidas, atormentándolas con la humillación, el desprecio y la acusación. A ese escenario aterrador llego Jesús, quien no solo resultaba ser el gran Medico, sino también el restaurador de las heridas más profundas que abaten los corazones tocados por el pecado.
Ante ese gran Medico llego este leproso, quien no solo acudía a él para recibir la sanidad física, ya que sus palabras “si quieres puedes limpiarme” expresaban la necesidad imperiosa de una purificación total, especialmente del alma.
Escucha lo que dice el poeta: «Andaba el buen Jesús por un camino, / de sus largas jornadas por el mundo / y era entrada la noche cuando vino / a postrarse a sus pies un vagabundo».
En estos tiempos que corren de aparente luz y progreso, Jesús recorre cada rincón del planeta buscando a esas personas que, entrada la noche espiritual, caminan por las calles como vagabundos.
«Ten piedad de mis llagas miserable, / tu que llevas el bien por do caminas. / Tócalas con tus manos admirables / que convierten en rosas las espinas».
¿Te sientes desesperada por las llagas que cubren tu vida?, ¿Constituye el rechazo una herida mortal para ti? Tal vez, como le sucedía a aquel sentenciado a muerte, la llaga del pecado cubre tu vida cual lepra mortífera que te lleva a recibir solamente el desprecio y el rechazo del mundo. Si es así, no olvides que aquel hombre encontró solución en el mismo lugar y con la misma persona que tienes a tu disposición: Jesús. El Señor lo recibió, y no lo censuró. No lo rechazo ni le dijo que arreglara su vida antes de acudir a él. A los pies de Jesús, el leproso encontró el restablecimiento de su alma encadenada. Hay también para ti un lugar a los pies de Jesús.
Jesús es la única solución para la lepra mortal del pecado.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

ATLETISMO ESPIRITUAL

Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante. Hebreos 12:1.

Ayer mencionamos la importancia del deporte y el ejercicio físico como recreación, y hoy hablaremos de los "ejercicios espirituales" del creyente.
¿Has escuchado hablar de un maratón? Estoy seguro que sí, pero igualmente deseo recordarte en que consiste y como comenzaron. Los maratones completos son competencias de carrera pedestre que no muchos pueden realizar. Se trata de correr cuarenta y dos kilómetros sin parar en el menor tiempo posible. Este tipo de competencia nació con la civilización griega y se lo practicaba en los días de Pablo.
Por eso, a modo de ejemplo, se refirió a la vida y el crecimiento cristianos en término de una gran carrera o maratón. Al escribir su primera carta pastoral a la iglesia de Corinto, Pablo les recuerda: " ¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis" (1 Cor. 9:24).
Si desea ganar, la persona que se prepara para correr un maratón no está libre para hacer lo que desea. Tiene una alimentación rigurosa a fin de que su cuerpo se prepare para el desgaste que significa ese esfuerzo. Dedica tiempo todos los días a entrenar, para que sus pulmones, sus músculos y su mente se encuentren en óptimas condiciones para la competencia. A todo esto se suma el descanso metódico, no a cualquier hora ni por una cantidad antojadiza de tiempo, sino lo justo para reponer las fuerzas perdidas y tener nuevas energías para continuar con la práctica.
¿Te imaginas a un corredor de maratones que sale con sus amigos de noche y vuelve a la madrugada; que come sin control cualquier tipo de alimentos y entrena cuando quiere? Correr en un maratón es algo serio, que requiere sacrificios de cada competidor.
De manera similar, las Escrituras nos animan a participar de la "competencia" espiritual, dándonos la seguridad que si ponemos todo de nuestra parte, Dios coronara nuestros esfuerzos con la victoria. No se trata de correr para ser salvo, ya que la salvación nos fue dada de manera gratuita por la muerte de Jesús, sino que corres porque ya eres salvo.
Si estabas pensando abandonar la carrera cristiana porque parece larga y difícil, el versículo de hoy es más que apropiado: "Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante". No te desanimes, no te des por vencido; sigue adelante, que el premio te está esperando.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

OS RESTITUIRE

Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros. Joel 2:25.

“Restituir", en el original hebreo, es shalam. Literalmente, significa estar en paz con Dios. Hubo muchos periodos tristes en la historia de Israel. La tristeza no era el problema; el problema era que se alejaban de Dios, siguiendo sus propios caminos. Y el resultado de esa actitud de terquedad humana era triste: desgracia; derrota; humillación delante de los enemigos; tierras desiertas o, en la mejor de las hipótesis, destruidas por las plagas.
Lamentablemente, los seres humanos solo percibimos las tragedias del cuerpo: hambre, necesidad, falta de abrigo. Cosas útiles, tal vez, pero son apenas consecuencias de la raíz de todos los problemas, que es el alejamiento de Dios.
Sin embargo, la historia nos muestra que, cada vez que el pueblo desobediente se arrepentía de su actitud rebelde y se volvía de sus malos caminos, la promesa divina era promesa de restitución. El pacto de paz que el pueblo había violado era restaurado por el Señor y, en consecuencia, las bendiciones regresaban como si nunca se les hubiesen retirado.
La tragedia de la humanidad es que solo espera las bendiciones, pero no desea regresar, de corazón, a los caminos de justicia. Multitudes llenan estadios en busca de una bendición material, pero el corazón continúa vacío, porque el verdadero problema es el distanciamiento de Dios.
Por eso, a lo largo de la Biblia encontramos, una y otra vez, la invitación divina a regresar. En Génesis, Dios llega al Jardín y llama a sus hijos: "¿Dónde están?" En Apocalipsis, el último libro de la Biblia, las últimas palabras son: "Y el Espíritu y la esposa dicen ven, y el que oye diga ven, y el que tiene sed, venga".
¿Cuántas veces tendrá que llamarte el Señor Jesús, para que entiendas que, sin él, nada de lo que logres en este mundo tiene sentido? ¿Cuantas veces tendrá que dormir a la intemperie, esperando que le abras el corazón?
¡Hoy es el día de buena nueva! Hoy es el día de salvación. No saigas de casa sin la seguridad de que has regresado al Señor. "Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

miércoles, 25 de mayo de 2011

CIEGOS QUE VEN

¿Teniendo ojos no veis, y teniendo oídos no oís? (Marcos 8:18).

Aunque a lo largo de mi vida he dedicado más tiempo a desarrollar mi talento musical, la poesía llega hasta mí como una joya de la literatura que me lleva a sentir una magia absolutamente especial. Mi esposo, a quien considero un excelente declamador, conserva una libreta en la que, cuando era joven, recopilaba hermosas poesías de las más variadas fuentes. En estos días la tome en mis manos y, mientras la hojeaba, mis ojos recorrieron la historia de la niña ciega que vio a Dios. He querido compartirla hoy contigo con el deseo de que encuentres en ella una fuente de inspiración para el día que tienes por delante.
«¡Que ciego es el mundo, madre, /que ciegos los hombres son! / Piensan, madre, que no existe / más luz que la luz del sol. / Cuando en los paseos, / cuando por las calles voy, / todas las gentes me miran / y me tienen compasión. / Y oigo que hombres y mujeres / murmuran a media voz: / "¡Pobre ciega, pobre ciega, / que no ve la luz del sol!" / Hay muchos que ven el cielo / y el transparente color / de las nubes, de los mares / la perpetua agitación, / más cuyos ojos no alcanzan / a descubrir al Señor / que tiene leyes eternas, / que sujeta a la Creación».
¿Gozas del privilegio de ver a Dios? Aunque el don de la vista es realmente apreciado, los que podemos usarlo corremos el peligro de volvernos ciegos ante la belleza cotidiana. Nos quejamos y añoramos la comodidad y la prosperidad y, aunque nada de eso es malo, no debemos descuidar la verdadera belleza que proviene de un corazón agradecido a Dios por sus múltiples y habituales bendiciones. Reconocer en todo lo que te rodea la belleza inigualable y las bendiciones insuperables que Dios te obsequia diariamente, te dará una perspectiva mucho más clara de cómo es ese Dios que tanto te ama y se preocupa por ti.
Disfruta esa luz celestial, esa luz que te alumbrara aun cuando el sol se retire y la oscuridad parezca prevalecer.
Para ver la luz de Dios no necesitas tus ojos, sino tu corazón.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

DOMINIO PROPIO

Como ciudad derribada y sin muralla, es el hombre sin dominio propio. Proverbios 25:28 (Reina-Valera 2000).

El cuerpo humane fue hecho por Dios para estar en movimiento. El trabajo que les encargo a Adán y Eva en el Edén no era una obra meramente intelectual. Todas sus facultades físicas, mentales y espirituales se unían en el cumplimiento de sus labores diarias en el paraíso.
Luego que el pecado entro a la tierra, el trabajo físico se intensifico (Gen. 3:17-19), pero aún así el trabajo continúe siendo una bendición del Creador para sus criaturas.
Actualmente, muchas personas rehúyen el trabajo que demande esfuerzo físico. Lo curioso es que entonces se tienen que emplear horas en el gimnasio o en la práctica de deportes. Pero incluso algo tan inofensivo como los deportes puede tornarse en un problema en la vida de algunos.
Al participar de un deporte, muchos lo hacen de manera tranquila. Se exigen a sí mismos para lograr el mejor resultado, pero su temperamento no se altera con una derrota. Desafortunadamente hay algunos deportistas que al no obtener el resultado esperado se transforman en agresores de sus compañeros o de los jugadores contrarios. Emplean insultos, burlas y hasta llegan a la violencia física.
El sabio Salomón aconsejo a todos los que tienen propensión a exaltarse y ser iracundos: "Como ciudad derribada y sin muralla, es el hombre sin dominio propio". Es posible que el enemigo de Dios emplee el deporte que te gusta para que pierdas la noble virtud del "dominio propio", dada por el Espíritu Santo (Gal. 5:23).
Pero más allá de lo que el desee, jamás podrá obligarte a que cedas a sus invitaciones y tentaciones. Eres tú el que decides. Por eso, al practicar cualquier tipo de deporte, no olvides que también allá esta Jesús contigo, y haz del dominio propio el invitado de honor a cada cita deportiva.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

BENDITO

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo. Efesios 1:13.

Cuando el Señor Jesús estuvo en la tierra, se dirigió, un día, a cierto grupo de personas, y les dijo: "Vosotros sois hijos del diablo y las obras de vuestro padre, el diablo, queréis hacer". Personalmente, creo que esta fue una de las declaraciones más fuertes de Jesús. Esto es, fuertes, desde nuestro punto de vista; pero, el Señor no los estaba agrediendo; simplemente estaba describiendo la triste situación del ser humano natural.
El ser humano solo necesita nacer, para pertenecer al reino de las tinieblas. No es una opción; todos nacemos en pecado y destituidos de la gloria de Dios. Pero, nadie se va a perder por eso, porque Dios proveyó el remedio; y el remedio es Jesús. Ese es el mensaje del texto de hoy. Pablo resalta a Dios como el Padre de Jesucristo no porque Jesús sea menos Dios que el Padre, sino porque desea poner de relieve la bendición espiritual con la que fuimos bendecidos, en los lugares celestiales, al pasar de nuevo a formar parte del Reino de Dios; al volver a ser hijos de Dios.
Juan lo expresa de otra forma: "Amados, ahora somos hijos de Dios". Y antes, ¿de quien éramos hijos? "Antes", cuando no conocíamos a Jesús; cuando vagábamos sin rumbo, en el reino de las tinieblas; cuando nos dirigíamos inexorablemente hacia la muerte; cuando no teníamos esperanza, y si la teníamos, estaba limitada solamente a las cosas pasajeras de este mundo, éramos hijos del pecado.
Pero, todo eso ya paso. Es historia. Una historia triste, tal vez; pero quedo enterrada en el polvo del olvido porque el Señor Jesucristo vino a este mundo, y no tuvo vergüenza de llamarse nuestro hermano, al asumir nuestra naturaleza y cargar con nuestros pecados.
Por eso hoy, sal hacia el cumplimiento de tus deberes con la frente en alto. Eres un príncipe en el Reino de Dios. Nada le debes al enemigo: tu vida fue clavada en la cruz del Calvario, en la persona de Jesús. Eres libre para soñar, para vivir, para volar hacia el destino glorioso que Jesús te prepare desde antes de la fundación del mundo: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

martes, 24 de mayo de 2011

LA PAZ

En paz me acostare asi mismo dormiré, porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado. (Salmos 4:8).

¿Has tenido un sueño reparador? No siempre lo logramos, ¿verdad? ¿Cuantas noches interminables has vivido a lo largo de los últimos años? ¿Cuantas horas sin que el sol aparezca y traiga reposo a tus ojos cansados?
Muchas veces se cruzan en nuestro camino noches de silencio. Las preocupaciones, el sufrimiento, la incertidumbre y los sentimientos se agolpan en nuestra mente y nos perturban durante las horas en las que deberíamos estar descansando. Qué bueno sería poder afirmar cada noche, como el salmista: «En paz me acostare».
Quizás te preocupas excesivamente por cosas que no tienen tanta importancia como tú crees, por cosas que no puedes solucionar con tus propias fuerzas. Si es así, presta atención a la segunda parte del versículo de hoy: «Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado». Esa es la única manera de obtener un descanso reparador: poniendo la confianza en Dios.
A continuación comparto contigo unas palabras de sabiduría que te pueden ayudar a establecer prioridades en tu vida.
  • El obstáculo más grande, el miedo.
  • El día más bello, hoy.
  • El mayor error, darse por vencido.
  • El peor defecto, el egoísmo.
  • La mejor distracción, el trabajo.
  • La peor bancarrota, el desánimo.
  • Los mejores maestros, los niños.
  • El sentimiento más vil, la envidia.
  • El regalo más hermoso, el perdón.
  • Lo más maravilloso del mundo, el amor.
  • La felicidad más dulce, la paz.
Hay muchas cosas que pueden perturbar tu paz mental, porque no sabes canalizarlas de manera apropiada. Por eso la confianza en Dios es vital para alcanzar la paz interior. Muchas noches (demasiadas) son las que te roban la paz por causa de una conciencia perturbada por reproches, acusaciones e insatisfacciones. Cuando este ladronzuelo trate de forzar la puerta de tu corazón, «encomienda a Jehová tu camino, confía en el, y el hará» (Sal. 37: 5). Repasa tu proceder y pide la ayuda divina. Entonces, tus sueños serán pasajes inolvidables que moverán el suave engranaje de tu paz interior.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

¡TEN CUIDADO!

Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga. 1 Corintios 10:12.

Llevamos varios días en el tema de los juegos electrónicos y, a modo de confidencia, quiero que sepas que no escribí desde un punto de vista netamente teórico. Hasta no hace muchos años, los juegos eran una parte muy importante de mi vida, pero las responsabilidades y la cordura me convencieron que lo mejor era terminar con todo esto.
Hay otro tipo de juegos y pasatiempos que es igualmente peligroso: los juegos de azar. Fíjate que el ladrón no comienza robando un banco, el alcohólico no se inicia tomando un litro de vodka cada mañana, el fumador no comienza fumando cuarenta cigarrillos por día, y el que prueba las drogas no se hace adicto la primera vez.
Para llegar a ser un ladrón, alcohólico, fumador o drogadicto fue necesario un contacto regular con el objeto de la adicción a lo largo de una cantidad de tiempo. Algunas adicciones, como el tabaco o las drogas, necesitan muy poco tiempo de contacto, ya que la sustancia química produce una dependencia rápidamente. Otras, como el hábito de robar o el alcoholismo, necesitan más tiempo para que se desarrolle la dependencia.
Los juegos de azar, lamentablemente, también están en este último grupo. No comienzas apostando tu casa, tu auto o tu cuenta bancaria de la noche a la mañana, pero quien dedica tiempo y esfuerzo día a día a estos juegos, llega a pensar que podría enriquecerse con la "habilidad" que ha desarrollado. De esta manera comienza un camino que, en cientos de casos, es sumamente difícil abandonar.
Quizás, al leer esto, estás pensando: "Esto nunca me pasara a mí; solo juego con mi familia y con algunos amigos", pero debes tener cuidado. Para todos los que creen estar seguros se aplica el consejo paulino que dice: "Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga". Miles de personas, de distintas edades y nacionalidades, pierden todas sus posesiones y hasta su propia vida por entregarse de lleno a los juegos de azar. Lo triste es que la persona adicta a los juegos de azar se convence a si misma de que su perdida es momentánea, que al día siguiente recuperara lo perdido.
En su amor, Dios desea cuidarte y protegerte de aquellas cosas que el enemigo usa para destruir a las personas. Así como existe Alcohólicos Anónimos para los que desean abandonar la bebida, existen organizaciones para los que desean abandonar el vicio del juego. Pero, ¿hará falta llegar a esa condición para admitir que existe un peligro real en los juegos de azar?
Por eso, ten cuidado. Dios te ama y te perdona cuando te equivocas, pero prefiere que antes de caer, camines por la senda segura.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

JUICIOS INSONDABLES

¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Romanos 11:33.

La noche estaba oscura, en medio del desierto. El aullido de los chacales la volvía más tétrica y asustadora. Tres jinetes cabalgaban en silencio, aprovechando que el sol dormía. Caminar durante el día seria suicidio; nadie podía soportar las inclemencias del calor.
Al llegar al lecho seco de un rio, el guía les ordeno: ¡Alto! Los tres jinetes obedecieron al instante. Habían prometido al guía que lo obedecerían en todo, aunque las ordenes fuesen, en apariencia, sin sentido.
A pesar del cansancio, los jinetes bajaron de los caballos y colocaron pedregullos en sus bolsos, conforme a la orden del guía. ¿Para qué?, preguntaban en su corazón; ¿por qué no aprovechamos la noche para avanzar?
Continuaron el viaje descontentos, refunfuñando en su interior; molestos con las órdenes incoherentes del extraño beduino. En medio de las sombras, se escuchó la voz del hombre del desierto: "Mañana, al salir el sol, ustedes estarán felices y, al mismo tiempo, tristes". Y desapareció.
Ellos avanzaron solos, extenuados por el viaje agotador; dos de ellos, inclusive, arrojaron algunos pedregullos al ver que el guía no los acompañaba. Las horas pasaron. El sol salió, esplendoroso y brillante. Era hora de detenerse y descansar. Pero antes, metieron las manos en el bolsillo, para ver el pedregullo, y ¡no podían creer lo que veían! Eran diamantes de mucho valor: ¡eran ricos! Pero inmediatamente la tristeza se apodero del corazón. ¿Por que no habían recogido más? ¿Por que no aceptaron las órdenes del guía, sin reclamar?
La vida es así. Caminamos en el desierto de un mundo lleno de tinieblas, y no podemos ver lo que encontramos en el camino. Cuantas veces pensamos que Dios nos abandonó o que no le importan nuestros problemas. Cuantas veces discutimos sus maravillosos designios. Vez tras vez, incluso, pensamos que es injusto al permitir que el dolor llegue a nuestra vida.
Pero, el sol del día eterno llegara, cuando Jesús aparezca en las nubes de los cielos; y ese día entenderemos que el pedregullo que cargamos eran los diamantes más preciosos.
Comienza este día con la determinación de aceptar los planes divinos, sin discutir ni protestar. Di, como Pablo: "¡Oh, profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

lunes, 23 de mayo de 2011

LÁMPARAS ENCENDIDAS

Jehová va detente de ti; el estará contigo, te dejará ni te desamparará: No temas ni te intimides. (Deuteronomio 31:1).

Una viuda y su hijo se cobijaban de la tormenta. Temerosa de los truenos, la madre trataba de proteger a su hijo apretándolo contra su seno. El niño, al sentir el temor de su madre, la miró y, con sus ojos azules, le pregunto: « ¿Esta Dios encendiendo sus lámparas?». De repente, todo quedo en calma. Aunque afuera el vendaval persistía con furia, el corazón de aquella madre volvía a la bonanza. Su hijo le había devuelto la paz. Si, Dios estaba al control. La tormenta y su poder deslumbrante no podían mas que mostrarle que Dios tenía para ellos luz en medio de la tempestad.
¿Cuantas veces has sentido miedo por los vendavales que amenazan tu vida o la de los tuyos? ¿Cuantas veces te has refugiado en el lugar más seguro de tu habitación para que nadie te viera llorar? ¿Cuantas veces le has sentido arrastrada por las fuertes olas de las carencias materiales o físicas? Entonces, para ti es la pregunta: « ¿Verdad que es brillante la luz de Dios?».
El Señor está encendiendo sus lámparas para que puedas ver aun en medio de la oscuridad. ¿Te parece raro el método divino? Conozco personas que temen a las tormentas y buscan alguna compañía humana. Y yo me pregunto: ¿Podrá algún humano, por mucho que se empeñe, controlar las fuerzas de la naturaleza? Entonces no te parezca nada raro si Dios usa hasta los rayos y los truenos para ensenarte una lección de amor, cuidado y protección.
Puede ser que estos rayos representan la falta de salud o de dinero, la soledad o la traición, incluso puede que la abundancia de bienes y la fama traten de caer sobre ti causando los mismos efectos que una terrible tormenta. Es ahí donde debes mirar hacia arriba y contemplar la luz divina, que puede y quiere alumbrar tu camino. Si abres tu corazón a la influencia de Cristo, tu vida se elevara por encima de cualquier tempestad, obteniendo la paz que solo se encuentra en confiar en Dios. Atrévete a levantar tu vista y a descubrir la luz de Dios.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

VIOLENCIA EXAGERADA

Toda buena dádiva y todo don perfecto descienden de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. Santiago 1:17.

En el día de ayer hicimos un pequeño bosquejo de los juegos electrónicos tan conocidos y difundidos en la actualidad, pero hubo un tema relacionado con ellos que ignore a propósito: la violencia.
¿Te has percatado de cuanta violencia nos rodea? Si tienes la bendición de tener un hogar donde reina la paz y el amor, aún así te circunda la violencia. Si miras televisión, veras que absolutamente todo, incluso los informativos, está lleno de escenas violentas o alusiones a la violencia. También la música actual a menudo promueve e incita la rebeldía y la violencia. Ni hablar de las películas, que hacen tan vividas y tan reales las escenas de violencia, que pareciera que los actores en efecto son golpeados.
Los deportes, comúnmente asociados con la salud, también se han visto afectados por jugadores violentos o por fanáticos que descargan toda su furia cuando su equipo favorito no logra ganar. Es más, han surgido varios deportes nuevos que contienen una alta dosis de violencia.
¿Qué está pasando? ¿Por qué tanta violencia? Como si todo esto fuera poco, los juegos informáticos más vendidos y quizá más adictivos son aquellos en que el protagonista es un súper hombre que destroza a "los malos" hasta exterminarlos por completo. En otros casos, el jugador es el que da las órdenes, para que sus "soldados" invadan y destruyan sin piedad a gente, tierras, casas y hasta animales.
¿A donde iremos a parar? ¿Hace falta tanta violencia para llamar la atención? Muchos de esos juegos que a simple vista parecen inofensivos, han sido colocados por el enemigo de Dios para apartar la mente de lo que realmente vale. "El deseo de excitación y agradable entretenimiento es una tentación y una trampa para el pueblo de Dios y especialmente para los jóvenes. Satanás está preparando constantemente seducciones que distraigan las mentes de la obra solemne de preparación que están a punto de sobrevenir" (Consejos para los maestros, padres y alumnos, p. 309).
Hoy, el Padre de las luces te invita a que busques "toda buena dadiva y todo don perfecto", para que tu vida se prepare para el evento que cambiara al mundo: la segunda venida de Cristo. Por eso no dejes que nada distraiga tu mente de esa preparación, ni siquiera el mejor juego de video del mundo.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

UN SUEÑO

Y sonó José un sueño, y lo conto a sus hermanos; y ellos llegaron a aborrecerle más todavía. Génesis 37:5.

La historia de José es una historia de sueños. La Biblia lo llama "José, el sonador". El centra de sus sueños era Dios. Aquella tarde, cuando sus hermanos lo vendieron y fue llevado a Egipto, una tierra distante, miro por última vez desde la colina hacia las tiendas de su padre, e hizo una promesa a Dios: "Señor, no sé adónde voy ni adónde me llevan; pero, pase lo que pase, cueste lo que costare, nunca dejare de amarte. Las personas pueden quitarme la libertad, pueden intentar acabar con mis sueños, pueden arrancarme los brazos, las piernas, e incluso alejarme de mi familia. Voy a un país donde no tengo amigos, y nadie me conoce. Voy como esclavo; tal vez, para comenzar lavando platos y limpiando baños. Pero voy contigo y, pase lo que pasare, nunca dejare de amarte". El amor de Cristo inspiró la vida de José todos los días. Fue vendido como esclavo, y se mantuvo fiel frente a las más audaces tentaciones. Y ¿cuál fue la recompensa que recibió por su fidelidad? La prisión.
En este mundo, no siempre tu fidelidad va a traerte, como recompensa, el cielo. En esta tierra, a veces, la fidelidad va a traerte hambre, pobreza, renuncia, y hasta el desprecio de tus amigos. No te preocupes. Si Jesús está contigo, si le has entregado la vida a Cristo, vayas a donde vayas, el Señor ira contigo. Y desde la prisión, desde la mazmorra, desde la desgracia, te va a levantar y te va a convertir en un príncipe, porque tú eres hijo del Reino; has nacido para serlo y, finalmente, llegaras a serlo.
José es el hombre que nunca dejo de amar a Dios. Por su amor a Dios, descendió a las profundidades del dolor y del sufrimiento; pero, también, fue levantado de alii, hasta las cumbres más elevadas. Llego a ser el segundo hombre más poderoso de Egipto, una naci6n pagana.
Si tú luchas en busca de un futuro mejor, amas a Jesús y nunca te apartaste de su amor, y pese a eso, parece que todo te va mal; si, no obstante, mantienes tu amor y tu fidelidad por Cristo, créeme que Dios te va a colocar en los lugares más altos.
Haz de este un día de sueños; que el más grande de todos sea permanecer fiel a Dios hasta el fin, a pesar de la incomprensión de tus hermanos. Porque "soñó José un sueño, y lo conto a sus hermanos; y ellos llegaron a aborrecerle más todavía".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón

domingo, 22 de mayo de 2011

UNA MUJER ACTUAL

Enséñanos del todo a contar nuestros días que traigamos al corazón sabiduría. (Salmos 90:12).
La sabiduría no forma parte del paquete genético que interviene en la formación de un nuevo ser. El coeficiente intelectual puede ser heredado, pero la sabiduría proviene de una relación directa con Dios.
En nuestros días es muy común encontrar mujeres muy capacitadas para realizar trabajos importantes. Especialistas en medicina, ingenierías, científicas, ¡cuán formidable puede ser la aportación de una mujer al desarrollo de una tarea importante! Sin embargo, la inteligencia no es sinónimo de felicidad. Hay muchas personas inteligentes que no logran encontrar la felicidad que anhelan. Mientras que, por otra parte, hay personas con un nivel bajo de inteligencia que han alcanzado la sabiduría divina, y con ello han obtenido un gran tesoro.
El consejo divino nos insta a contar nuestros días de tal modo que traigamos a nuestro corazón sabiduría. Contar nuestros días no es velar por la carrera desenfrenada del calendario. Tampoco es mirarnos en el espejo para descubrir los surcos que el tiempo va dejando en la piel. Contar nuestros días significa velar porque no pase uno solo de ellos sin contar con la compañía y el consejo divinos. Que no pase un solo día sin que recibamos instrucciones espirituales y las pongamos en práctica. Contar nuestros días es deleitarnos en la compañía de Jesús. Muchas personas se preocupan por contar sus días para garantizar un futuro de riquezas o poder, sin embargo, esto no aporta gozo cuando la sabiduría divina no está presente.
Centremos nuestros esfuerzos en ser mujeres sabias, dirigidas por Dios. Algunos piensan que el término «sabiduría» pertenece a la antigüedad, o al ámbito filosófico y que está lejos de la mujer actual ser sabia. El mercado de cosméticos y la moda se han enfrascado en una lucha contra la sabiduría. Han impuesto una tiranía que presenta solo una cara deslumbrante pero que está regida por los deseos que dejan a un lado la razón y el buen juicio.
Hoy tienes una inmejorable oportunidad para demostrar al mundo que si existen mujeres sabias, dirigidas por aquel que nos hizo con amor y por amor. Sea esta tu oración matutina: «Señor, deposita en mi tu sabiduría y enséname a contar mis días».

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

JUEGOS ELECTRÓNICOS

Todo me es lícito, pero no todo conviene, todo me es lícito, pero no todo edifica. 1 Corintios 10:23.

Cuando tenía once años, Rulo, uno de mis amigos de la infancia, me llevo a un lugar que me fascino desde el primer momento que entre: un salón de Juegos electrónicos. Había toda una variedad, imágenes y sonidos estremecedores que daban la sensación de estar "dentro" de un juego, y aunque teníamos que pagar para luego jugar, nos ingeniábamos de alguna manera para conseguir dinero.
Con el paso de los años, esos juegos comenzaron a acercarse más a la realidad y a adquirir un aspecto tridimensional. Finalmente, con la llegada de las computadoras a los hogares, esa tecnología creció hasta lo que conocemos hoy.
Existen juegos de todo tipo y para todos los gustos. Hay juegos de aventura, de artes marciales, de guerra, de estrategia y otros. Es llamativo el ingenio que los programadores han puesto en estos juegos. Entre los factores que atrapan la atención de los jugadores se encuentran: Imágenes llamativas y sugestivas, el sonido y la música, el sentido de aventura y suspenso, la satisfacción de lograr un triunfo y el deseo de terminar el juego.
Pero, así como en todas las cosas, es importante lograr un equilibrio. Esos juegos llamativos hacen que miles de jóvenes se dediquen a ellos de manera tan obsesiva que le quiten tiempo al estudio, la familia, los amigos y los deportes. Con una dedicación casi hipnótica se sumergen en los juegos y se olvidan del mundo que los rodea. Sus ansias de jugar se tornan insaciables.
Con el deseo de que los cristianos corintios tuvieran un sano equilibrio en sus decisiones, el apóstol Pablo les aconsejo: "Todo me es licito, pero no todo conviene, todo me es licito, pero no todo edifica". La niñez y la juventud dedican mucho tiempo a los juegos, y los jóvenes de las últimas décadas aumentaron su "dosis" de entretenimientos con los pasatiempos cibernéticos. Pero cuidado: hay que tener equilibrio y saber darle el lugar que les corresponde.
Nuestro Padre de amor te da la libertad de elegir tus distracciones, pero te exhorta para que ninguna de ellas logre dominar tu voluntad. Con sabiduría aprende a controlar tus pasatiempos, y tu vida estará llena de valiosos triunfos espirituales, sociales, académicos y laborales.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

LA BUENA VOLUNTAD DE DIOS

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por media de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Romanos 12:2.

¿Cómo sería tu vida si fuese solo el cumplimiento de la voluntad de Dios? ¿Dónde estarías, si siempre hubieses cumplido la voluntad de Dios? El texto de hoy afirma que la voluntad de Dios, para ti, es agradable y perfecta.
El apóstol Juan lo dice de otra manera: "Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma". Prosperidad en todas las cosas, no solo en la vida espiritual. Dios desea lo mejor de lo mejor, para ti: esa es la voluntad "agradable y perfecta" del Señor. Pero, eso no se cumple en tu vida por acaso; existe una condición para el cumplimiento de esta promesa. Y la condición es: "No te conformes con la manera de pensar de las personas que viven en estos días, sino renuévate por el conocimiento de la Palabra de Dios". El resultado es que comprobaras la buena voluntad de Dios para ti.
La palabra "comprobar", en el griego, es dokimazo, que tiene la connotación de hacer suyo un concepto, después de haberlo analizado. ¿Quieres saber cuál es la voluntad agradable y perfecta de Dios para tu vida? ¿Quieres que esa voluntad se haga una realidad en tu experiencia? Necesitas renovarte. No puedes acomodarte a la manera de pensar de los seres humanos.
La mayoría de las personas de nuestro tiempo considera a Dios un detalle sin mucha importancia. El "dios energía" está de moda, porque no demanda compromiso; a la energía tú la usas y, cuando no la necesitas más, la descartas. Pero, Dios no es simple energía, es una Persona. Y con una persona tienes que relacionarte con compromiso. Necesita estar presente en tus decisiones, proyectos y planes.
Hoy es una oportunidad de conocer la agradable y perfecta voluntad de Dios para ti. Por eso, no salgas de tu casa sin la seguridad de que has renovado tu manera de pensar mediante el estudio y la meditación de la Palabra de Dios. Si lo haces, ciertamente hoy será un día de victoria, y las cosas que, aparentemente, se presentaban sin solución serán superadas, porque una cosa es luchar solo y otra, completamente diferente, es luchar sabiendo que Jesús está a tu lado. "No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón