viernes, 17 de enero de 2020

GEMELOS PERO DIFERENTES

Sus padres los llamaron Esaú Y Jacob. Esaú era el mayor, por eso tenía derecho a más cosas. Le gustaba salir de caza y llegó a ser un gran explorador.
Jacob estaba siempre cerca de su madre, ayudándola. También se ocupaba de las ovejas de su padre.
Un día, Esaú volvió del Campo cansado Y hambriento. En la casa, se encontró con Jacob, que estaba cocinando lentejas. Entonces, le pidió comida a su hermano menor, pero Jacob le propuso cambiar la comida por las ventajas de ser el hermano mayor.
Como tenía mucha hambre, Esaú dijo que sí, pero sin pensarlo primero. Con el tiempo se dio cuenta de que había cometido un error.

¿Y yo?
¿Tomas decisiones sin pensar, como lo hizo Esaú? Es mejor pensar antes de hacer o decir algo.

Mi oración para hoy
Jesús, ayúdame a tomar buenas decisiones. 

En la Biblia leemos:
«Guíame, encamíname en tu verdad, pues tú eres mi Dios y Salvador. ¡En ti confío todas horas!» (Salmo 25: 5).

DEVOCIÓN MATUTINA PARA LOS MÁS PEQUEÑOS 2020
«CADA DÍA CON JESÚS»
Por: Maria Augusta Lopes, Lara Figueiredo, Paulo Sérgio Maced
Lecturas Devocionales para preescolares 2020.

UN ARCO IRIS EN EL CIELO

He puesto mi arco iris en las nubes, y servirá como señal de la alianza que hago con la tierra. Génesis 9: 13

—Hoy continuaremos con el relato de Noé —dijo el padre—. Como les contaba ayer, el diluvio fue una experiencia terrible: las sacudidas constantes de un lado al otro debido a la intensidad del viento y la ferocidad de las aguas nos daban miedo; sobrevivimos porque Dios nos protegió. Después de que se pudieran ver las primeras cúspides de las montañas, solté un cuervo para que inspeccionara. Anduvo sobrevolando y, al no encontrar un lugar donde posarse porque la tierra aún estaba cubierta de agua, regresó al arca. Después solté una paloma, que también regresó. Dejé pasar otros siete días más y de nuevo envié a la paloma, que volvió esta vez con una rama de olivo en el pico. Nos sentimos muy felices, porque eso significaba que pronto podríamos salir del arca ya que la tierra se estaba secando.
Por fin, un día un ángel llegó a abrir la puerta del arca, salimos y pudimos ver que el paisaje era muy diferente a como había sido antes del diluvio. La belleza del lugar donde habíamos vivido había desaparecido. El paisaje era desolador comparado a lo que conocíamos. Sin embargo, estábamos confiados en que Dios seguiría con nosotros, así que lo primero que hice fue construir un altar para realizar un sacrificio. Eran pocos los animales que habíamos conservado, pero dimos una ofrenda a Dios con nuestro corazón rebosante de gratitud porque nos había salvado la vida.
Dios aceptó nuestro sacrificio y nos hizo la promesa de que no volvería a haber otro diluvio. Un arco iris hermoso apareció en cielo. Era la señal para las siguientes generaciones. Cuando los niños lo vieran y preguntaran qué era, debíamos recordarles la promesa de Dios de que nunca más destruiría la tierra con agua. Dios cuidó de nosotros y también cuida de ti.
¿Sabias que…. Sem, Cam y Jafet nacieron cuando Noé tenía quinientos años?

DEVOCIÓN MATUTINA PARA MENORES 2020.
“DESCUBRE EL MEJOR LIBRO DEL MUNDO”
Por: Noemí Gil Gálvez
Lecturas Devocionales para Menores 2020.

“TENÍA UN MILLÓN DE PREGUNTAS PARA HACERLE A DIOS; PERO, CUANDO LO CONOCÍ, TODAS SE DESVANECIERON DE Ml MENTE, PORQUE DEJARON DE TENER IMPORTANCIA». CHRISTOPHER MORLEY

Los perros no se quejan, por eso hacen mejor compañía que los presentadores de programas de entrevistas, que tienden a pasarse la tarde quejándose del gobierno. Sin embargo, aunque no se quejen, creo que los perros pasan esos momentos en que inclinan la cabeza hacia un lado porque están desconcertados por sus amos humanos.
Los pensamientos de mi perro probablemente sean algo así: ¿Porqué duermes en una habitación y tu niño duerme en otra habitación, a varios metros de la tuya? ¿Lo estás castigando? ¿Por qué no podemos dormir todos en una gran pila frente a la chimenea?
Y otra cosa importante: ¿Por qué ustedes, los seres humanos, siempre tienen esta comida caliente, que huele deliciosa, mientras que yo solo obtengo un plato de esta cosa seca que parece estiércol de cabra al horno? Eso no me parece justo.
De paso, ¿quién es esa persona llamada No por la que muestran tanto entusiasmo? Y ¿por qué siempre mencionan al señor No cuando estoy tratando de sacar comida a hurtadillas de la mesa?
No entiendo por qué los seres humanos no huelen las cosas. Hay tantas cosas interesantes que se pueden aprender sobre el mundo a través del olor; en lugar de pasarse el día mirando esos artilugios con sonidos que llevan siempre en la mano, deberían salir afuera y oler los arbustos.
Además, y no quiero quejarme, pero ¿por qué salen de cacería sin mí? ¿No soy parte de la jauría? ¿Por qué tengo que quedarme en casa mirando por la ventana mientras que ustedes rastrean la comida y la traen en bolsas de plástico? ¡Quiero ir con ustedes!
No sé si existe la posibilidad de que los perros nos entiendan más de lo que nosotros entendemos a Dios. Nos preguntamos por qué Dios no nos ayuda a evitar las dificultades o por qué no nos da las cosas que tienen otras personas. Es un misterio. Todo lo que podemos hacer es confiar en que él nos ama y esperar pacientemente, al lado de la ventana, a que nuestro Señor regrese. Kim
«Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los míos -afirma el Señor-. Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra!» (Isa. 55:8, 9).

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADOLESCENTES
“UNA IDEA GENIAL”
Por: Kim Peckham
Lecturas Devocionales para Adolescentes en 2020.

CUIDA TU RELOJ BIOLÓGICO

Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar» (Mat 11: 28). 

Argentina estaba preocupada por su hermano mayor, pues hacía varios días que él no lograba conciliar el sueño. Tantas noches sin dormir habían hecho mella en su aspecto físico: se veía lóbrego, apagado, sin fuerzas, y reflejaba angustia. Para intentar ayudarlo a recuperarse, su familia lo internó en un centro de salud. Eran una familia de campesinos, por lo que necesitaban cada mañana contar con energías suficientes para labrar la tierra. Aunque se dejaron todos los ahorros en el tratamiento de él, mereció la pena. Si uno no logra conciliar el sueño y descansar bien durante la noche, todo nuestro cuerpo se ve afectado, así como nuestras facultades mentales.
Existen muchos casos similares de personas cuyas cargas físicas son tan duras, cuyas preocupaciones son tantas, y cuyo sufrimiento es tan grave, que a la hora de acostarse, no logran quedarse dormidos. Si ese es tu caso, espero que la reflexión de hoy te pueda servir de utilidad.
Verás, nuestro cuerpo es una máquina extraordinaria que hemos de saber optimizar. Conocer sus ciclos (su reloj biológico) nos ayuda a sacarle el mayor rendimiento posible. Para ello, es útil saber que pasa por tres círculos principales cada día:
El círculo de eliminación, de 4:00 am a 12:00 pm. Estas son las horas en que tu cuerpo libera más toxinas.
2 El círculo de apropiación, de 12:00 pm a 8:00 pm. Durante este tiempo el cuerpo está más despierto y activo, como también lo están los procesos de digestión y metabolismo.
El círculo de asimilación, de 8:00 pm a 4:00 am. Es el ciclo de la reparación del organismo. Durante estas horas, el cuerpo está revitalizando las células y los órganos, por eso es recomendable lograr descansar durante este periodo de tiempo. De ese modo, podremos levantarnos por la mañana reparadas, con energías y plenas facultades mentales,físicasy espirituales.
Querida amiga, si estás tan abrumada que no logras conciliar el sueño, por favor recuerda que Jesús ha prometido llevar tus cargas. Cuando recuestes tu cabeza sobre la almohada cada noche, deposita tus cargas en él, pídele una buena noche de descanso, y cierra los ojos confiada en que él tiene poder y fuerza para hacerse cargo de tu vida. Descansa por fe en él, y recuerda que bástale a cada día su afán.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA DAMAS 2020
UN DÍA A LA VEZ
Patricia Muñoz Bertozzi
Lecturas Devocionales para Mujeres 2020.

¿PUEDES SER CAMPEÓN DEL MUNDO?

«El impío huye sin que nadie lo persiga, pero el hombre justo vive tranquilo como un león» (Proverbios 28:1).

El 5 de junio de 1986 estaba yo sentado en una platea del estadio Cuauhtémoc de Puebla (México) para presenciar el partido entre Argentina e Italia durante el Mundial de fútbol de aquel año. Justo frente a mí estaba el túnel por donde salían los jugadores. De pronto, apareció Diego Armando Maradona seguido del equipo argentino, y a su lado salieron los italianos. Yo me acerqué con otros chicos para gritar de emoción a los modernos gladiadores. Pero los jugadores iban muy concentrados. Alessandro Altobelli marcó para Italia a los seis minutos del partido. Un poco más tarde, Maradona anotaría el gol del empate. En aquel torneo se consagraría como una leyenda del fútbol mundial.
Menos de diez países han logrado ganar el campeonato mundial de fútbol. Dichos equipos llegan a la justa deportiva con la seguridad de que pueden ganar. Los demás tienen otro tipo de aspiraciones, por ejemplo, se conforman con pasar a la segunda ronda o incluso llegar a semifinales. El punto es que no creen que puedan ser capaces de ganar la copa, aunque tengan grandes jugadores y condiciones favorables para lograrlo. Argumentan que su fútbol no tiene un gran nivel, tradición, historia, entre otras cosas. Y ante tantos pretextos, terminan siendo perdedores. Pero hay equipos que sí creen que pueden ganar, aunque su estilo de juego y preparación dejen mucho que desear. He ahí la gran diferencia. Y aunque parezca simple, así es. Detrás de los grandes triunfos deportivos se encuentra la certeza de que es posible ser vencedores.
En la vida sucede algo parecido. A pesar de contar con grandes ventajas, muchos jóvenes no creen que van a tener un futuro promisorio. Más bien, se conforman con muy poco y exhiben actitudes mediocres, participando en el juego de la vida sin ninguna esperanza de salir vencedores. Se concentran en sus supuestas desventajas y alegan que no tienen dinero ni preparación académica ni son físicamente atractivos. Y ese tipo de actitudes los condiciona para salir derrotados. Lo peor de todo es que la derrota les parece algo completamente natural. ¡Ya la esperaban! ¿Por qué? Porque así habían condicionado su mente y no hicieron nada para construir un futuro distinto.
La concentración en las metas, la preparación física, la consagración a Dios y la buena actitud pueden hacer de un joven un campeón del mundo. Aquí no importa el color de la piel, la nacionalidad, la estatura, la situación económica o social. Tú eres el constructor de tu propia historia. ¿Lo crees? En tu respuesta se revelará tu futuro.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2020
UNA NUEVA VERSIÓN DE TI
Alejandro Medina Villarreal
Lecturas devocionales para Jóvenes 2020

LA DRACMA PERDIDA


“¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una dracma, no enciende la lámpara, barre la casa y busca con diligencia hasta encontrarla?” (Lucas 15:8).

Cuando nuestra hija (J) tenía tres o cuatro años perdía con frecuencia algún juguete, ropa u objeto. Buscábamos por todas partes y al final le preguntábamos:
—Claudia, ¿dónde está tu muñeca?
Echando una ligera ojeada a su alrededor y con tranquilidad, respondía encogiendo los hombros:
—¡Está perdida!
De esa manera se despreocupaba y pasaba a otra actividad. Pero tal actitud no es fácil de encontrar en los mayores. Cuando perdemos algún utensilio, herramienta u objeto, nos irritamos y no somos capaces de hacer otra cosa hasta encontrar lo perdido.
Esta es la conducta de la mujer que tenía diez monedas y perdió una. En primer lugar, se trataba de una pérdida importante: una dracma era el valor del salario de un día, una suma relevante para una mujer sencilla. Existía además en aquel tiempo la costumbre de que, antes de una boda, el padre de la novia le entregaba diez dracmas a modo de dote en caso de necesidad. Algunos comentaristas nos dicen que las casadas llevaban sus diez dracmas en una diadema a la vista de todos; así que todo el mundo se daba cuenta cuando se perdía alguna moneda.
En segundo lugar, la búsqueda fue intensa. Las casas en el oriente eran oscuras y llenas de polvo y tierra. Por ello, nuestra mujer enciende la lámpara, barre la casa y se resuelve a encontrar la moneda. Finalmente, la búsqueda es exitosa. Encuentra la dracma, acude a sus amigas y vecinas y todas se gozan en el hallazgo. Jesús añade: “Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente” (Luc. 15:10), dando a entender que cada uno de nosotros somos esa moneda cada vez que nos perdemos.
La parábola tiene un valor especial en términos de estima propia. La moneda, por preciosa que sea, no puede cumplir su misión de proporcionar bienes mientras esté perdida. Lo mismo ocurre con nosotros: no participamos del gozo de servir hasta que nos encontramos con Jesús y llegamos a ser completos. Con frecuencia el Señor usa a otros (la mujer en la parábola) para que nos busque y nos invite a regresar a Dios. Otras veces, el Espíritu Santo actúa directamente sobre el corazón y nos convence.
La imagen de la moneda es excelente pues las monedas llevan la marca de la autoridad que las acuña. Tú y yo llevamos la marca del Creador en cada cual y su imagen se restaura en nosotros cuando él nos encuentra. Respondamos hoy afirmativamente al Señor cuando nos busque.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2020
UN CORAZÓN ALEGRE
Julián Melgosa y Laura Fidanza
Lecturas devocionales para Adultos 2020