sábado, 25 de enero de 2020

SIN PELEAS

Los pastores de ovejas que servían a Abraham siempre estaban peleando con los pastores de su sobrino Lot. Lo que pasaba era que los rebaños de ambos pastaban en los mismos lugares y, a veces, la hierba y el agua no eran suficientes.
Entonces, Abraham le dijo a su sobrino que eligiera los campos que más le gustaran para no seguir peleando. Abraham aceptó quedarse con las tierras que Lot no quisiera.
Abraham era amigo de Dios y sabía que el Señor ama la paz Y no la guerra.

¿Y yo?
A ti tampoco te gustan las peleas, ¿no es cierto?

Mi oración para hoy
Querido Jesús, ayúdame a evitar las peleas hoy y siempre.

En la Biblia leemos:
«Tú y yo somos parientes, así que no está bien que haya pleitos entre nosotros, ni entre tus pastores y los míos» (Génesis 13:8).

DEVOCIÓN MATUTINA PARA LOS MÁS PEQUEÑOS 2020
«CADA DÍA CON JESÚS»
Por: Maria Augusta Lopes, Lara Figueiredo, Paulo Sérgio Maced
Lecturas Devocionales para preescolares 2020.

LA BENDICIÓN DE DIOS NOS CAMBIA

El hombre contestó: «¿Para qué me preguntas mi nombre?» Luego el hombre lo bendijo allí mismo. Génesis 32: 29

—Continuaremos hoy con el relato que comenzamos ayer —comentó el padre— y que nos imaginamos que nos cuenta Jacob con sus palabras.
Los años de trabajo pasaron muy rápido y había llegado la hora de casarme con Raquel. Cuando se lo recordé a mi tío, él estuvo de acuerdo y se hizo una gran fiesta. Pero me engañó y, en vez de darme a Raquel por esposa, me dio a su hermana Lea. Supe entonces lo que se sentía al ser engañado. Así que tuve que trabajar otros siete años por Raquel y al fin pude casarme con ella. Ahora tenía dos esposas y mis hijos empezaron a nacer. En total tuve doce hijos y una hija. Después de veinte años de mi partida, decidí regresar a la casa de mis padres, pues el trato que recibía de mi tío no era el mismo que al principio.
Emprendimos el regreso, pero yo tenía mucho temor a mi hermano Esaú. Recordaba que había dicho que me iba a matar. Al llegar al arroyo de Jaboc, dejé que todos pasaran y me quedé solo para orar. De repente alguien me tocó y pensando que era un enemigo, empecé a luchar y a orar. Al amanecer, me di cuenta de que no había estado luchando con una persona común, sino con un ser celestial. Entonces le dije que no lo iba a dejar hasta que me bendijera. Él me bendijo y cambió mi nombre por «Israel»; yo ya no era un «suplantador».
Mandé avisar a mi hermano de que yo estaba a punto de llegar, y él salió a recibirme con cuatrocientos hombres armados, pero no me hizo daño. Cuando nos vimos, nos abrazamos, lloramos y él me perdonó. No pude irme con él como quería porque yo debía ir al paso de los niños y del rebaño. Después de un tiempo llegué y saludé a mi padre.
Mi engaño me costó el destierro y el remordimiento por veinte años, además de no volver a ver a mi madre. Pero me sentía feliz porque Dios me había perdonado. Por eso, te digo hoy: nunca engañes a nadie; no merece la pena y el precio que se paga es demasiado alto.
¿Sabias que….. Israel significa el que lucha con Dios?

DEVOCIÓN MATUTINA PARA MENORES 2020.
“DESCUBRE EL MEJOR LIBRO DEL MUNDO”
Por: Noemí Gil Gálvez
Lecturas Devocionales para Menores 2020.

«CUANDO UNA PUERTA DE LA FELICIDAD SE CIERRA, OTRA SE ABRE, PERO MUCHAS VECES MIRAMOS TANTO TIEMPO LA PUERTA CERRADA QUE NO VEMOS LA QUE SE HA ABIERTO». HELEN KELLER

Había sido un largo día de viaje para Reefy su familia. Habían visto cosas maravillosas en su recorrido por Italia, pero ahora todos querían desplomarse sobre la cama en el pequeño hotel donde se habían detenido para pasar la noche. El padre y el abuelo ya habían entrado; los demás miembros de la familia estaban llevando el equipaje a sus habitaciones.
La abuela entró al ascensor y tocó el número de su piso. Respiró profundo para calmarse. Los ascensores de los hoteles baratos de Europa son pequeños. No mucho más grandes que una heladera, a decir verdad. Y hacían sentir incómoda a la abuela. De pronto, el ascensor se detuvo, pero la puerta no se abrió. La abuela trató de no entrar en pánico. Volvió a presionar el número de su piso. No sucedió nada.
-No puedo salir del ascensor… ¡Ayuda! -exclamó.
Entonces, vio un teléfono. Lo tomó, y la atendió la recepcionista.
-¡Buena sera! -saludó alegremente.
-Estoy encerrada en el ascensor —dijo la abuela, levantando un poquito la voz-. La puerta no se abre.
La recepcionista no dijo nada por un momento.
—Mire detrás de usted -respondió, finalmente.
La abuela se dio la vuelta. Bueno… mira eso, pensó. ¡El ascensor tenía puertas de los dos lados! A través de la puerta de atrás, que estaba abierta de par en par, podía ver el pasillo a su habitación. La abuela se rio y colgó el teléfono.
Cuando el pueblo de Israel estaba atrapado entre el ejército del faraón y el Mar Rojo, entró en pánico. Lo que no sabía era que Dios iba a abrir una vía de escape en una dirección inesperada.
Dios quiere que confíes en él la próxima vez que estés en una situación difícil. Mantén la calma, y busca la puerta de escape que él ha abierto para ti. Kim
«Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no sea común al género humano. Pero Dios es fiel, y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida a fin de que puedan resistir» (l Cor. 10:13).

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADOLESCENTES
“UNA IDEA GENIAL”
Por: Kim Peckham
Lecturas Devocionales para Adolescentes en 2020.

ESPÍRITU, ALMA Y CUERPO

“Que todo vuestro ser —espíritu, alma y cuerpo— sea guardado irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo” (1 Tes. 5:23, RVR 95).

Nunca olvidaré cuando me dijeron que debía regresar a mi país. Fue una maravillosa e inesperada noticia, que conllevaba dos cosas: guardar todo lo que quería llevar conmigo y deshacerme de lo que no iba a necesitar. Cometí errores en el proceso y terminé no sabiendo guardar pertenencias que más tarde me hicieron falta. Esto, en lo material, no es grave, pero en la vida cristiana hay cosas que hemos de saber guardar. El apóstol Pablo nos dice cuáles son: nuestro espíritu, nuestra alma y nuestro cuerpo; es decir, todo nuestro ser. No podemos dejar ningún aspecto de nuestra vida sin someter a la influencia de Dios.
“Espíritu”. El espíritu es la vida: “Entonces su espíritu volvió, e inmediatamente se levantó” (Luc. 8:55, RVR 95). El espíritu es la capacidad de pensar, razonar, existir: “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios” (Rom. 8:16, RVR 95). Y hemos de guardarlo. ¿Cómo? De la manera que el mismo Pablo nos indica en Romanos 12:2: “Cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios”. Una razón santificada es la que debe regir nuestra vida.
“Alma”. Es esa parte de nuestra naturaleza donde están nuestras emociones, nuestros instintos, nuestros anhelos. Esa parte que ha de estar dominada por una razón santificada, de manera que sus impulsos se sometan cada vez más a la voluntad divina. Guárdala, irreprensible, dice el Señor, tu Dios.
“Cuerpo”. Es la materia frágil de la que estamos hechas, y que debe estar sometida a una mente santificada que no abuse de él y a un alma convertida que lo lleve a servir de instrumento a favor del bien. Cuidar de la salud física del cuerpo y pedirle a Dios que lo use para avanzar su causa son las dos maneras de guardarlo.
Nuestro Señor Jesucristo va a regresar, y cuando ese día llegue, quiere encontrar todo nuestro ser (espíritu, alma y cuerpo) irreprochable, irreprensible, sin mancha. Para que eso suceda, hemos de guardarlo bien hoy, y mañana y pasado… Ese es el proceso de la santificación. Pidamos al Señor que nos enseñe y nos ayude a caminar en ese camino, para que nos encuentre listas cuando llegue a buscarnos.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA DAMAS 2020
UN DÍA A LA VEZ
Patricia Muñoz Bertozzi
Lecturas Devocionales para Mujeres 2020

LA IGNORANCIA ES ATREVIDA

“El perezoso se considera más sabio que siete sabios que sepan aconsejar” (Proverbios 26:16).
Un día, un periodista preguntó al famoso cantautor Jim Morrison (1943-1971), vocalista del legendario grupo The Doors, acerca de sus problemas con el alcohol. El joven respondió:
-Cuando leí que el alcohol es un grave inconveniente para la salud, tomé una decisión muy drástica: dejé de leer.
¡Qué brillante solución! Para él, la vía de escape a sus problemas consistía en ignorarlos, actuar como si no existieran y despreciar las advertencias que se le daban acerca de un mejor estilo de vida. Pero ese método no le dio muy buenos resultados. Jim no logró superar su adicción al alcohol y murió a los 27 años en París (Francia) debido a una probable sobredosis de heroína, aunque como no hubo autopsia, las causas de su muerte quedaron envueltas en el misterio.
Baltasar Gracián (1601-1658), el gran escritor del Siglo de Oro español, dijo: “El primer paso de la ignorancia es presumir de saber”. Hay personas que se consideran más inteligentes que los médicos más capaces: ¿Por qué deben seguir sus recomendaciones para cuidar la salud? ¿Qué saben esas personas sobre lo que es mejor para ellos? ¿Por qué deben evitar las bebidas alcohólicas si sus compañeros hablan maravillas de ellas? Incluso llegan a pensar que están exagerando o no conocen lo suficiente el tema y no saben nada de la vida. ¿De verdad crees que este tipo de razonamiento tiene algún sentido? También he conocido a jóvenes que creen que saben mucho más que los mejores pilotos de coches, y te preguntan: “¿Por qué tenemos que obedecer las señales de tráfico si es muy divertido ignorarlas?”
Uno de los rasgos de la gente ignorante es el orgullo. No desea escuchar consejos y menosprecia las palabras de los sabios. Más bien, presenta todo tipo de argumentos ridículos para defender su actitud irresponsable ante la vida y despreciar las oportunidades de trabajo que se le presentan. Por el contrario, la gente sabia es sumamente sencilla y está lista para escuchar las recomendaciones que se le dan, aunque vengan de las personas más humildes; además, tiene los ojos bien abiertos para aprender de la naturaleza, de las vivencias cotidianas, la historia, la ciencia o el arte.
¿Y tú qué quieres ser? ¿Qué actitud asumirás ante los buenos consejos que recibes?
En este día pide al Señor que te ayude a asumir actitudes inteligentes ante la vida y te dé un espíritu abierto al aprendizaje.

DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2020
UNA NUEVA VERSIÓN DE TI
Alejandro Medina Villarreal
Lecturas devocionales para Jóvenes 2020

UNA BODA PROHIBIDA

“Te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad y misericordia” (Oseas 2:19).

Nazneen era una jovencita de solo catorce años cuando fue prometida a Aasir, quien tenía dieciocho años. Aunque los dos jóvenes no pasaban mucho tiempo juntos, ambos albergaban sueños maravillosos de matrimonio dichoso, rodeados de hijos en un ambiente feliz y con un futuro venturoso. A pesar de su juventud, Nazneen era capaz de amar de corazón a su prometido. Aasir era bondadoso y apuesto con un trabajo decente y con toda probabilidad de ser un excelente marido. Y todo podría haber sido así a no ser por lo que ocurrió una noche. A las dos de la madrugada entraron ladrones en la casa de Nazneen. Amordazaron a sus padres, se apropiaron de todo objeto de valor y encontraron a Nazneen y a sus dos hermanas pequeñas asustadas en el dormitorio. Los malhechores tomaron a la chica mayor con intenciones de violarla. Como Nazneen sabía la trágica consecuencia de tal acto, agarró un cuchillo y a gritos les dijo que, como siguieran en su intento, ella se quitaría la vida. Los ladrones se amedrantaron y huyeron con el botín sin deshonrar a la muchacha. Cuando Aasir y su familia supieron del suceso, dijeron que la joven estaba ya “usada” y no era digna de casarse con Aasir. La boda nunca se celebró.
Aasir y su familia no repudiaron a la joven por haber sido violada, sino por haber sido objeto de un intento fallido de violación. La virginidad es una condición de altísima estima en muchas sociedades y culturas del presente y del pasado. Lo era también en el pueblo de Israel. Si se descubría que una recién casada no era virgen y había evidencia de su culpabilidad, debía ser apedreada (Deut. 22:13-21).
El libro de Oseas muestra abiertamente, para que lo entienda bien cualquier defensor de la virginidad y de la fidelidad, que el Dios del universo está dispuesto a casarse con un pueblo adúltero, una vez se haya arrepentido. Está dispuesto a perdonar transgresiones que algunos pueblos castigan con la muerte para recuperar el honor de la familia.
La actitud de Dios presentada en el libro de Oseas desmonta cualquier forma violenta de restaurar el honor y perdona a la mujer errada: su pueblo escogido. Por supuesto que Dios aplica el justo castigo (Ose. 2:13), pero luego la seduce, la lleva al desierto, habla a su corazón (vers. 14) y se casa con ella (vers. 19). ¡Qué hermosa lección de amor y perdón para que la apliquemos a nuestras costumbres y tradiciones!

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2020
UN CORAZÓN ALEGRE
Julián Melgosa y Laura Fidanza
Lecturas devocionales para Adultos 2020