jueves, 3 de marzo de 2011

ESPEJITO, ESPEJITO... 1 PARTE

Engañosa es la gracia y vana la hermosura. (Proverbios 31:30).

La vanidosa reina que quería ser la más bella se ha convertido en el prototipo de muchas mujeres que, aunque no se consideran malvadas como ¡a bruja de Blancanieves, sí desean tener siempre a mano algo o a alguien que alabe su hermosura. Podemos obtener grandes lecciones de los dos personajes centrales de este cuento: la madrastra, mujer sin escrúpulos, celosa y malvada, aunque bella; y Blancanieves, joven sencilla, muy hermosa externamente, pero más hermosa aún en su interior.
¿Te has dado cuenta de que estás rodeada de muchas mujeres y de que todas y cada una de ellas tienen encantos especiales? ¿Es eso motivo de envidia para ti? ¿Cómo manejas el hecho de que tu belleza es superada por la de otras? ¿Te sientes acomplejada o inferior porque Dios no te ha dado un físico más deslumbrante?
Cuando era adolescente pensaba mucho en mi tísico. La juventud en sí misma ya nos hace bellas, pero sentimos la necesidad de gustar a los demás. Yo jugaba a formarme a mí misma con lo mejor de mis antepasados. Primeramente me pondría un cabello rubio con muchos rizos suaves y abundantes, igual que mi abuela materna. Después tendría sus preciosas piernas, que la gente no se cansaba de elogiar. Y así iría cambiando cada parte de mi cuerpo por la de alguna otra mujer de mi familia que consideraba más hermosa que yo. Un día me di cuenta de que me estaba obsesionando con ser más bella de lo que Dios me había hecho, en lugar de darle gracias por cómo me había creado. Ese momento fue determinante para mí; siempre lo recordaré, porque entonces decidí que el espejo no sería el juez de mi belleza.
El carácter de aquella doncella llamada Blancanieves era lo que realmente la había convertido en la mujer más hermosa del reino. La Biblia nos asegura que la gracia y la hermosura son vanas si no están revestidas del amor de Cristo. Preocúpate hoy por tu belleza, pero no te mires en ningún espejo mágico. La verdadera magia proviene del hecho real de contemplar a la persona de Jesús.
Sea hoy tu oración: «Señor, ayúdame a ser bella, como tu corazón».

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

LÍMITES CLAROS

Examina la senda de tus pies, y todos tus caminos sean rectos. Proverbios 4:26.

Para muchos la palabra "novio" significa: "no vio", y podríamos agregar: "no vio a dónde se metía" o "no vio con quién se metía". Pero justamente cuando llega el amor y se ve realizado a través de un noviazgo es cuando más se necesitan los ojos para ver. El enemigo de Dios procurará cegarte para que te equivoques y formes lazos con alguien que no te hará feliz y a su vez no será feliz contigo. Esta etapa es para observar, con una perspectiva objetiva, quién está a tu lado y para qué está contigo.
Luciana era una de las señoritas más "cotizadas" de la iglesia a la que asistí, no solo por su belleza física, sino también por sus talentos y dedicación a Dios. A punto de ingresar a la universidad conoció a un joven adventista y después de una breve amistad formalizaron su noviazgo. Se los podía ver juntos en la Sociedad de Jóvenes, en la Escuela Sabática y los sábados por la noche en las actividades sociales de la iglesia.
Como tenía cierta confianza con ella, cada tanto me interesaba en su relación, hasta que un día, al preguntarle si todo marchaba bien, me respondió: "Capellán, corté con mi novio". No la veía triste ni sufrida, y me llamó la atención, porque siempre se habían mostrado muy enamorados; así que como dejó la puerta abierta, le pregunté por qué. Ella respondió: "La historia es larga, el problema es que nos costaba encontrar límites en los momentos de intimidad, y la relación se desgastó. Yo esperaba que él como adventista pusiera en práctica hasta dónde se puede ir con los besos y las caricias, y en la teoría estaba todo bien, pero en la práctica se le iban las manos".
Con cuánta sabiduría Salomón aconsejó a los jóvenes: "Examina la senda de tus pies, y todos tus caminos sean rectos". Para cada etapa de la vida hay demostraciones de afecto que corresponden. Por eso, en todo lo que hagas, debes analizar tus pasos para que no se aparten de la senda marcada por la Biblia. En el noviazgo, debes mirar doblemente, porque puedes cometer equivocaciones que luego lamentes en el futuro. Dios desea que disfrutemos plenamente el amor con la persona escogida y la bendición del cielo, y para eso es necesario no separarse a la derecha ni a la izquierda de lo que el Señor nos aconseja. Recuerda siempre que en el plan de Dios, todo tiene su momento y él desea que seas feliz con el amor de tu vida.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuela

NUNCA FALLA

La ley dejehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Salmo 19:7.

El verano agoniza aquí, en Portland, y como triste lamento de su partida, el cielo llora las primeras lluvias del largo invierno que terminará solo en marzo del próximo año.
Llora también la familia de Isidoro, un mejicano que atravesó la frontera y, al ser preso, se quitó la vida: "Mejor morir que ver mis sueños hechos polvo", escribió en un trozo de papel usado. En el salmo 119, de donde fue tomado el versículo de hoy, la ley y el testimonio de Jehová se refieren a las enseñanzas divinas que te llevan hacia la tierra de los sueños: la felicidad.
Las enseñanzas del Señor son el camino que conducen a esa meta deseada. El ser humano quiere ser feliz; lucha, trabaja y se esfuerza para serlo. Recorre distancias infinitas, cruza fronteras, se arriesga y, finalmente, envejece y llega a la conclusión de que la felicidad está fuera de su alcance.
La Biblia declara categóricamente, sin embargo, que la felicidad existe, pero que no es hallada por casualidad; hay que buscarla por el camino correcto.
La felicidad no es la ausencia de problemas. Este mundo está lleno de dificultades. Vivir feliz es el arte de enfrentar los problemas con sabiduría, y salir de esa lucha victorioso. La mayor necesidad del ser humano, para alcanzar la felicidad, es la de sabiduría; por eso, en este salmo, el Señor promete dar sabiduría al sencillo. Sencillo es el humilde de corazón, que reconoce su insuficiencia y busca el consejo divino.
Cada día puede constituir una oportunidad de oro para el sencillo y sabio, que reconoce los errores de ayer y está dispuesto a recomenzar una nueva batalla. No hay guerra sin batallas perdidas; pero, tampoco hay batallas ganadas sin reflexión y reorientación.
El sabio aprende de los errores, de los fracasos, de las victorias... No cesa de aprender; no se cansa de consultar. No se desanima. Sigue al frente, seguro de que cada día es un nuevo día.
Por eso hoy, antes de iniciar la batalla de este nuevo día, deposita tu confianza en el Señor y en su nombre, y sal rumbo a la victoria, recordando que "la ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo".


Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón