martes, 31 de mayo de 2011

UNA LUZ PERMANENTE

Aarón preparara las lámparas en la Tienda de reunión, fuera de la cortina del pacto, para que ardan delante del Señor toda la noche. (Levítico 24:3 NVI ).

La Biblia especifica las minuciosas y precisas instrucciones que dio Dios para el buen funcionamiento del tabernáculo. ¿Qué lecciones prácticas podemos extraer de los pasajes que hablan del candelero, para aplicarlas a nuestra vida como mujeres?
1. El candelero era un mueble importante en el tabernáculo. Me agrada pensar que Dios me considera importante en este mundo.
2. Debía permanecer siempre encendido. Las mujeres podemos, con la ayuda de Dios, mantener la lámpara del amor siempre encendida.
3. Tenía brazos que se extendían alumbrando todo el recinto. Nosotras podemos extender nuestros brazos de misericordia donde otros no llegan.
4. La luz de las lámparas del candelero se reflejaba en las tablas cubiertas de oro e se hallaban a ambos lados del edificio, mostrando así toda su belleza. Nuestra débil aunque poderosa luz puede mostrar a otros la hermosura que hay en la mirada de Jesús, el Salvador.
5. Ningún candelero tiene luz propia. Solo podemos alumbrar al mundo con la luz celestial.
Hay para ti, mujer, una importante y gloriosa misión. Tú puedes marcar la diferencia en la vida de los que te rodean. Tú puedes reflejar la luz dc Dios. Tu puedes llevar esperanza, paz, sosiego, confianza y amor a los que están perdidos.
Alguien expreso poéticamente: «Ya hay demasiado fango en el sendero, / no amontones más. / Es ingrata tarca el hacer resbalar a los demás. / Ya hay demasiado barro por la vida / para que tu eches más. / Se tú de los que aparten ese barro / para no salpicar a los demás. / Ya hay demasiadas sombras por el mundo, / ya no le pongas más, / Haz tu vida tan clara y luminosa / que evites tropezar a los demás, / Hay tanta podredumbre donde quiera / que no es justo que tú la aumentes más; / echa a andar tu pureza sin temores, / y entonces vivirás.
Vive cada día como un candelero del altar divino. Deja que Dios mantenga su luz en ti. No importa donde estés o lo que poseas, en las manos de Dios, eres una estrella.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

¿QUIÉN CONTROLARA TU MENTE?

Y no os acomodéis al mundo presente, antes bien transformaos mediante la renovación de vuestra mente, de forma que podáis distinguir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable, lo perfecto. Romanos 12:2 (Biblia de Jerusalén).

El enemigo de las almas está dispuesto a ganar el gran conflicto en tu vida. No hay momento, circunstancia o lugar en que puedas estar seguro. Si el vio que le entregaste tu corazón a Cristo, peleara y te seducirá para que abandones tu lucha y te apartes de la senda señalada por la Biblia.
Para lograr el control de tu vida, necesita dominar tu mente. A través de todo lo que te rodea te perseguirá a fin de que tu mente se doblegue y acepte lo malo por bueno, y tenga lo bueno por malo. Esto parece absurdo e ilógico, pero es real. Jesús anticipo esta confusión cuando dijo: "Y aún viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensara que rinde servicio a Dios. Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mi" (Juan 16:2, 3).
Los medios de diversión actuales, utilizados y manipulados por el enemigo, tienen el propósito de bombardearte con mensajes mundanos a fin de que termines aceptándolos. Mientras que Jesús te dice: cuida tu cuerpo, el enemigo te ofrece mil propagandas y ejemplos de hombres y mujeres de fama que mancillan su salud con vicios destructores. Cuando Jesús te dice: dedica tiempo a estudiar la Biblia y a orar, el enemigo te presenta programas de televisión adictivos, juegos electrónicos que demandan alto poder de concentración y películas sumamente violentas para que malgastes tu tiempo en lo que no aprovecha. Mientras que Jesús te dice: cuida tu sexualidad, Satanás te inducirá a mirar películas e introducirte a través de Internet en imágenes o actividades inmorales.
Mientras Jesús te invita a que te recrees con ejercicio físico, algún pasatiempo u otra actividad que te ayuda a obtener nuevas fuerzas para proseguir en la vida y crecer espiritualmente, su enemigo te seducirá para que busques placeres nocivos para tu salud física, mental y espiritual.
Hasta que el Señor vuelva, el príncipe del mal luchara para obtener el control de tu mente. El versículo de hoy es clave para que Jesús gane la batalla: "No os acomodéis al mundo presente". No te acostumbres, no te adormezcas, no tomes por "natural" todo lo que está a tu alcance como diversión. Más bien dedica tiempo a "la renovación de tu mente", y de esta manera podrás "distinguir cual es la voluntad de Dios: lo bueno, lo agradable, lo perfecto".

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

OBRAS

El cual pagará a cada uno conforme a sus obras. Romanes 2:6.
Por algún motivo, muchos cristianos no entienden el lugar de las obras en la experiencia espiritual. Las obras no salvan a nadie. La Biblia enseña, con claridad meridiana, que la salvación es únicamente por la gracia maravillosa de Jesús. Este mensaje está presente desde el libro de Génesis, cuando un cordero, que simbolizaba a Jesús, era sacrificado a fin de resolver el problema de la desnudez humana; pasando por el pueblo de Israel, en que cada israelita tenía que ofrecer a Dios un corderito, como expiación por su pecado, hasta el libro de Apocalipsis, que termina diciendo: "La gracia del Señor este con todos vosotros".
Pero, el texto de hoy es también claro, al afirmar que el resultado final de la gracia son las buenas obras y que, finalmente, seremos juzgados por lo que hicimos o dejamos de hacer.
La gracia no está reñida con las obras; ambas tienen lugar en la experiencia de una persona que ha entregado su vida a Jesús. La gracia es la causa de la salvación; las obras, son su resultado. La confusión sucede cuando cambiamos los papeles, y pensamos que las obras nos califican para la salvación; o, ya que fuimos salvos en Cristo, no necesitamos preocuparnos por las obras.
La otra confusión surge cuando deseamos que las buenas obras sean el resultado de nuestro esfuerzo. Si para alguna cosa vale el esfuerzo humano, es para buscar a Jesús y mantener, con él, un compañerismo diario a través de la oración, el estudio de la Biblia y la testificación.
¿Por qué se necesita esfuerzo? Porque la naturaleza humana, que todavía cargamos, nos conduce lejos de Dios; no es natural que quiera vivir en comunión con Jesús.
Pero, el hecho de que no sea natural no significa que debas quedarte vegetando en el terreno de la mediocridad espiritual, y aceptes pasivamente una vida de derrotas espirituales.
La victoria es posible con Jesús. Por eso, el libro de Apocalipsis está repleto de promesas para los vencedores. La victoria no es una fantasía, ni una Utopía, ni algo reservado solo para quienes tienen gran fuerza de voluntad. La victoria es un presente de amor, que Jesús ofrece a los que, con humildad, lo buscan.
Haz de este día un día de victorias espirituales y de muchas obras, sabiendo que Dios "pagara a cada uno conforme a sus obras".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón