miércoles, 16 de marzo de 2011

LABIOS ENCENDIDOS

El hombre perverso promueve contienda (Proverbios 16:28).

Aunque este texto utiliza el género masculino para referirse a la raza humana, las mujeres estamos incluidas en la tendencia pecaminosa que impulsa nuestros labios a la contienda y al chisme. De hecho, tenemos fama mundial en cuanto a «darle a la sin hueso» se refiere. Es cierto que vivimos en un mundo comandado por un experto en la difamación, pero en lo particular, me considero discípula del general invencible Cristo Jesús, por lo que mi forma de vivir, mis impulsos y hasta mis pensamientos, deberán reflejar quién es el que mora en mi.
¿Te has preguntado quién es tu Comandante? ¿A quién sigues, y cómo lo haces? Si lo buscamos diariamente, nuestros labios estarán lejos de la crítica y del chisme. Existen siempre tantas cosas por las que podemos elogiar a una persona, que no hay cabida para la critica.
A una noble y simpática anciana se la conocía porque nunca hablaba mal de nadie, ni siquiera permitía que oiro lo hiciera en su presencia. Su teoría consistía en que siempre había alguna virtud en la que detenerse. Unos jóvenes, dispuestos a derrotar a aquella mujer, decidieron que ellos sí lograrían hacerle hablar mal de alguien. Llegaron a su casa y comenzaron a quejarse y a criticar al diablo. No les dio tiempo a decir mucho, poique inmediatamente la anciana afirmó: «Es cierto lo que dicen, pero este enemigo también tiene algunas cualidades en las que podemos meditar».
Aquello era demasiado para los muchachos que, asombrados, exigieron una explicación. «Pues bien», continuó la anciana, «la paciencia y la perseverancia son cualidades que muchos seguidores de Cristo deben poner en práctica».
No había más que decir. La lección estaba aprendida. Siempre habrá algo noble, y bueno que decir de los demás. Si hacemos esto nos ponemos al lado de Cristo, quien nos defiende en todo momento de las acusaciones del enemigo y nos presenta ante el Padre limpios por su sangre redentora.
Cuando te veas tentada a hablar de oirá persona sin control, recuerda quién es tu líder. No pierdas el cielo por causa de tus labios. Ayuda a los demás a encontrar la senda correcta. Sea hoy tu oración: «Señor, guarda mi boca de hablar engaño».

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

MODAS ASESINAS

Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia. 1 Timoteo 2:9.

Una de las herramientas que tiene el enemigo para destruir la vida espiritual de los hijos de Dios es la moda. No se sabe dónde comienza, no se sabe cómo llega, pero se ven sus efectos en la enorme influencia que ejercen sobre la vida de millones de personas. Muchísimos jóvenes pertenecen a este grupo de esclavos de la moda; si por alguna causa no tienen lo que la moda les dicta, se sienten desdichados e infelices. Trabajan, ahorran, piden o exigen a sus padres que se les otorgue lo que reclaman sus caprichos sin pensar en los gastos, con el propósito de no desentonar o sentirse fuera de moda.
La moda abarca casi todas las facetas de la vida en sociedad y una de ellas es la vestimenta. Gracias a los medios masivos de comunicación las modas varían mucho más rápido que años atrás, y a su vez son estos medios los transmisores de "lo que se usará este invierno" o de "la ropa del verano".
De manera natural, las damas buscan atraer las miradas masculinas (y viceversa), pero se debe tener cuidado con lo que pueden provocar en la mente del que ve. Es posible que David nunca hubiera caído en el pecado con Betsabé si no la hubiera visto desnuda, y también es posible que muchos jóvenes jamás se hubieran extraviado en los pecados de índole sexual, si no hubieran visto a jovencitas con minifaldas, blusas transparentes y pantalones ajustados. Los contornos femeninos que siempre llamaron la atención del hombre hoy se exponen con total naturalidad, porque la moda le quita la connotación negativa que pudiera tener.
Señoritas y jóvenes, cuidado con lo que exponen para que otros miren. Soy consciente de que lo que estoy escribiendo va en contra de lo que nos muestra la sociedad, y no quiero que se lo interprete como que propongo que nos vistamos a la usanza victoriana. Cada hijo de Dios debe examinar su forma de vestir para no provocar pensamientos impuros en aquellos que nos mirarán, ya que cuando el gran apóstol aconsejó: "Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia" no lo hizo pensando solo en las damas, sino también en los caballeros.
Dios desea que sus hijos sean puros en todo, y esa pureza no se aplica solo a la vida interna de la persona, sino que también debe impulsar a otros a ser decentes en miradas y pensamientos. Cada seguidor de Jesús es responsable en alguna medida de la vida espiritual de los que tiene a su lado, por eso no te permitas ser un tropiezo para aquellos que te observan.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuela

EN MEDIO DE TI

Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos. Sofonías 3:17.

No lo ves; yo sé que no lo ves. Hay momentos en que, por más que lo necesites y lo desees, no lo ves. Las nubes del dolor y de la tristeza son tan densas que no te permiten visualizarlo. En esos momentos, solo resta la fe.
¿Cómo entender que la persona que un día te juró amor eterno de repente mira a tus ojos y, casi con indiferencia, te dice: "Se acabó; necesito de un tiempo para pensar"? ¿Pensar... qué? ¿Que el amor no era amor? ¿Que no sabía lo que estaba haciendo; que se engañó?
La promesa bíblica de hoy es que el Señor está en medio de ti. Aunque no lo veas. Aunque el corazón herido te grite, llorando, que Dios también te abandonó. Aunque quisieras dormir, y nunca más despertar. Dios está en medio de ti, poderoso, y te salvará.
¿Te salvará... de qué? En los tiempos de Sofonías, Dios estaba prometiendo a Israel salvarlo de sus enemigos. La destrucción se aproximaba; el pueblo temía, y la promesa llegó por medio del profeta.
Tu situación, hoy, es diferente; no hay ejércitos enemigos que amenacen tu integridad física. Pero, la promesa es válida todavía: Dios te salvará del dolor, de las lágrimas; de esa noche oscura que estás viviendo.
Si Dios cree que es lo mejor para ti, trabajará en el corazón de la persona amada que se fue. Pero, tal vez, sea tu corazón en el que el Señor necesite trabajar. Para encontrar la felicidad en familia, es necesario primero ser feliz a solas.
La vida no acabó; aunque tus sentimientos lo digan en voz alta. La vida continúa. Hay sol allá afuera, y las flores se abren anunciando el nacimiento de un nuevo día. Despierta. Hay una multitud de ángeles dispuestos a cantar, en coro, tu victoria.
En el nombre de Jesús, repítete a ti mismo: "Estoy vivo". ¡Es eso lo que importa! Puede ser que estés herido, pero estás vivo y, con eso que te resta de vida, Dios todavía puede escribir la más linda historia. Recuerda: "Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón