miércoles, 11 de enero de 2017

SER COMO NIÑOS

Cambiará nuestro cuerpo para que sea como su propio cuerpo, Filipenses 3:21

Necesitarás una plancha y una camisa o blusa arrugada. ¿Has visto una camisa sin planchar? ¿Cómo se ve? Muy arrugada, como esta. A tu mamá le gusta que todos vayan al trabajo y a la escuela con la ropa bien planchadita, porque los quiere.
¿Has visto la piel de un bebé? Es tersa y sin arrugas. Pero a medida que pasan los años y crecemos, la piel se nos arruga. Nuestro cuerpo envejece poco a poco.
Las personas mayores sufren dolores y enfermedades. Su energía ya no es la de los jóvenes, hasta pierden poco a poco la memoria. ¿Sabes por qué pasa todo eso? Porque el pecado de Adán y Eva nos ha impedido tener un cuerpo eterno aquí en esta tierra. Todos envejecemos y morimos, por causa del pecado.
Pero la Biblia dice que algún día, cuando Cristo venga, nuestros cuerpos se renovarán y todos seremos jóvenes nuevamente. ¡Hasta nuestros abuelitos!
Ahora ayuda a tu mamá a planchar la camisa (blusa), para que recuerdes cómo seremos cuando Cristo venga.

HABLA CON JESÚS
Querido Jesús, deseo ir al cielo contigo y ver a todas las personas transformadas, amén.

Tomado de lecturas devocionales para preescolares 2017
¡PEQUEÑAS SONRISAS!
Por: Míriam Rodríguez Carrillo 
#PequeñaSonrisas  #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaPreescolares #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian

ENVÍAME A MÍ

“Desde antes que yo naciera, fui puesto bajo tu cuidado; desde el vientre de mi madre, mi Dios eres tú” (Sal. 22:10).

El 31 de octubre de 2015 se publicó en la prensa una noticia bajo el titular: “Ángel canino”. Interesante título, ¿verdad? Es que la noticia no es para menos. Un perro salvó la vida de un bebé recién nacido, que había sido arrojado a la basura por su mamá.
El hecho ocurrió en Sao Paulo, Brasil. Allí, una madre arrojó a su bebé recién nacido a un basurero, para que muriera abandonado. Sin embargo, Dios tenía otro plan para ese bebé. Y para llevar a cabo su plan, utilizó a una criatura que estaba a su disposición: un perro. Aquel perro fue como un ángel para el bebé: lo recogió y buscó ayuda, llevándolo a la casa más cercana. Así fue como lo salvó. Inmediatamente los vecinos llevaron al bebé al hospital, donde se está recuperando. Si no hubiera sido por ese perro, lo más probable es que el recién nacido habría muerto en la basura antes de que una persona pudiera encontrarlo.
Esta noticia se ha hecho muy popular. En Internet están las fotografías del perro, dando cuidado y amor al bebé. Pero ¿sabes qué cuenta en realidad esta noticia? Que Dios tiene misericordia de nosotros. Así como tuvo misericordia de un recién nacido que no podía valerse por sí mismo, tiene compasión de nosotros cuando lo necesitamos y nos envía a su ángel. A veces, en la forma de un amiguito o de un adulto; o, por qué no, de un animal que nos dé cariño.
Y ahora viene la parte más interesante de lo que realmente enseña esta noticia. Para poder hacer el bien en la vida de los demás, Jesús necesita tener un perro, un adulto o un niño a quien utilizar. Necesita a alguien que diga: “Jesús, envíame a mí”. Alguien que esté dispuesto a dejarse utilizar por Jesús para el bien de los demás. ¿Eres tú ese alguien?
Dios quiera que tú puedas ser hoy ese alguien a quien Jesús pueda utilizar para llevar alegría a la vida de otro, que lo está pasando mal. Si no te sientes capaz, pide a Jesús que te dé fuerzas. Él te las dará.

Tomado de lecturas devocionales para Menores 2017
¡SALTA!
Por: Patricia Navarro 
#Salta #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaMenores #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian

AVERGONZÁNDOME A MI MISMA

“Pero Esaú corrió a su encuentro y, echándole los brazos al cuello, lo abrazó y lo besó. Los dos lloraron” (Génesis 33:4).

Munca olvidaré la vergüenza que pasé en mi último año de universidad, cuando fui suspendida por haber pasado toda la noche fuera de la escuela. Mi hora de entrada eran las tres de la madrugada, pero me había quedado dormida en el sofá de una amiga. Cuando me suspendieron por este Incidente, yo decidí responder con una serie de cartas airadas y sátiras desafiantes. Mi situación habría podido ser peor, si no fuera porque uno de los decanos, la profesora Merth, me defendió públicamente diciendo: “Simplemente está molesta, pero es una buena muchacha; normalmente no es así”. No sé si yo merecía ese voto de confianza, pero nunca lo olvidaré. Durante años, después de eso, me sentí avergonzada cada vez que recordaba la manera en que había actuado.
Recientemente, volví a la universidad de visita y me encontré con la buena, y ya mayor, profesora Merth. De Inmediato toda la vergüenza volvió a mi mente. Yo sabía que, finalmente, las palabras saldrían de mi corazón: “Por favor, perdóneme por mi comportamiento de hace varios años”. Efectivamente, se lo dije. Hubo silencio. Alcé mis ojos para ver la expresión de su rostro. “Gracias -me respondió ella-, pero no sé de qué me estás hablando”. Todos aquellos años yo había estado avergonzada por nada, pues ella me había perdonado y lo había olvidado por completo.
Cuando Jacob se encontró nuevamente con su hermano Esaú, a quien había engañado y robado veinte años antes, estaba avergonzado. Se inclinó hasta el suelo siete veces mendigando su perdón (y ya había enviado regalos increíbles por adelantado). Entonces, Esaú corrió hacia él y lo rodeó con sus brazos. Todo había sido perdonado.
Cuando le haces daño a alguien, quizá te sientes bien en el momento pero, a largo plazo, te estás hiriendo a ti mismo. La mayoría de la gente va a seguir adelante y a dejar el episodio atrás, pero tú vas a llevar la vergüenza de tu comportamiento durante muchos años. Los males que causaste a otros, al final, te afectarán a ti. Recuerda esto hoy y trata a otros, incluso a aquellos con los que tienes conflictos, con amabilidad.

Tomado de lecturas devocionales para Adolescentes 2017
FUSIÓN
Por: Melissa y Greg Howell
#Fusión # UnPuntoDeEncuentroEntreTúyDios #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaAdolescentes #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian

“BIEN HECHO”

“El amo dijo: ‘Bien hecho, mi buen siervo fiel. Has sido fiel en administrar esta pequeña cantidad, así que ahora te daré muchas más responsabilidades. ¡Ven a celebrar conmigo!'” (Mat. 25:23, NTV).

o parecía una buena candidata a tía favorita. MI tía Florencia tenía muchos problemas de salud desde su nacimiento. Tenía dificultades con la visión, con el oído, y su capacidad Intelectual también era limitada. Los problemas que tenía en los riñones hacían que se le hincharan las piernas. También tenía problemas para masticar. Pero, aunque poseía pocos “talentos”, la tía Florencia cuidaba muy bien de mí y de mis hermanas cuando éramos pequeñas.
Mis dos hermanas y yo pasábamos las vacaciones de verano en la casa de nuestros abuelos, en un pequeño pueblo llamado Antigo, en Wisconsin, Estados Unidos. Nos quedábamos en un cuarto en el segundo piso, y la tía Florencia siempre hacía tiempo cada tarde para llevarnos a lugares mágicos. Caminábamos lo que parecían kilómetros, hasta una estación de tren abandonada, para jugar sobre los cimientos de una vieja casa abandonada. Nos llevaba al parque o a la tienda de la esquina, para comprar paletas que nos ayudaran a refrescarnos en el calor del verano. Se sabía los nombres de los insectos y los pájaros que veíamos por el camino, y podía imitar el sonido de la mayoría de ellos.
Cuando jugábamos dentro de la casa, ella siempre nos convencía de jugar a algún juego de mesa, o nos contaba alguna historia. Nos gustaba meternos en su cama a escuchar historias de misioneros en otras tierras; aun cuando nuestras habilidades de lectura eran mejores que las suyas, por lo que muchas veces teníamos que enseñarle a pronunciar palabras desconocidas para ella.
El cuarto en el que dormíamos era el de ella, así que, contábamos historias en la oscuridad o compartíamos sueños que ni siquiera se los decíamos a nuestros padres. Cada mañana, la veíamos bajarse de la cama y arrodillarse para orar. Sus oraciones eran audibles, si les poníamos atención. Ella llevaba a cada uno de sus seres queridos hasta el Trono de la gracia, oraba por nuestra felicidad, por nuestra salud y por nuestra salvación. Sus oraciones aumentaron en intensidad a medida que fuimos creciendo y nuestras vidas se fueron complicando, así como nuestros errores alcanzaban mayores consecuencias. Los días para ella terminaban de la misma manera en que comenzaban: de rodillas. Ella alababa a Dios por la certeza del retorno de nuestro Salvador y por el momento en que lo escucharía decir: “Bien hecho, mi sierva fiel”.
Cuánto aprecio el legado de la tía Florencia. Un legado de amor y devoción, que ahora llevo conmigo para bien de mis sobrinos, por los cuales oro todos los días. Y cuando me siento tentada a no ser una buena sierva fiel, agradezco a Dios por los recuerdos de la tía Florencia, e inmediatamente me siento inspirada.  Vicki Mellish

Tomado de lecturas devocionales para Damas 2017
VIVIR EN SU AMOR    
Por: Carolyn Rathbun Sutton – Ardis Dick Stenbakken
#VivirEnSuAmor #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaMujeres #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian

UN DÍA PARA LA PAZ

‘Apártate del mal, y haz el bien. Busca la paz, y síguela” (Salmo 34:14).

Ayer hablábamos de una guerra y hoy comentaremos sobre la paz. A veces, la vida es así. Dos onces de enero tuvieron que ver con la paz entre diferentes naciones del mundo. En 1947, Turquía y Jordania firmaron un pacto de amistad, y en 1954 se celebraron las primeras reuniones entre soviéticos y estadounidenses, sobre la prohibición de armas atómicas.
Dirás que, más allá de todos estos acuerdos y reuniones, el mundo continúa siendo un polvorín. Como decía Mafalda (la niña reflexiva de la historieta del dibujante argentino Quino), cada vez que se hace un llamado a la paz “da ocupado”.
Desde Génesis 14, las guerras son una realidad; cronológicamente, lo son desde Apocalipsis 12. Basta recorrer la historia de reinos y naciones para ver evidencias de que, tristemente, la trama humana está salpicada de sangre.
No obstante, existe la paz. En castellano, la palabra proviene del latín pax, relacionado con el verbo pacisci, “acordar” o “hacer un trato”. Así, luego de una conquista, los romanos establecían acuerdos con otros pueblos, mediante un pacto o un pago de tributos.
Este mundo pecaminoso muestra la imposibilidad de establecer la paz entre los países. Pero, la Biblia dice que podemos obtener la paz en Dios. ¿Cómo lograrlo?
– Apártate del mal: Este primer consejo está en nuestro versículo de hoy.
– Obedece su Ley: “Mucha paz tienen los que aman tu ley, y no hay para ellos tropiezo” (Sal. 119:165).
– Piensa en Dios y en las cosas celestiales: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti ha confiado” (Isa. 26:3).
– Recíbela como un don de Dios: “Les dejo la paz. Les doy mi paz, pero no se la doy como la dan los que son del mundo. No se angustien ni tengan miedo” (Juan 14:27, DHH).
– Confía en Jesús: “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33).
– No te afanes por las cosas de este mundo: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Fil. 4:6,7).
Hoy puede ser un día histórico. Sigue estos consejos. Construye la paz. Busca sosiego. Adhiere a la concordia. Vive sin ansiedades. “La paz interior y una conciencia libre de ofensas a Dios despertará y vigorizará el intelecto como el rocío que cae sobre las tiernas plantas” (Elena de White, Mente, carácter y personalidad, t. 2, p. 695). PA

Tomado de lecturas devocionales para Jóvenes 2017
UN DÍA HISTÓRICO
Por: Pablo Ale – Marcos Blanco
#UnDíaHistórico #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaJovenes #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian

EL PODER DE LA PALABRA

«Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos; y todo el ejército de ellos, por el aliento de su boca». Salmo 33: 6

En la palabra de dios está el poder creador que trajo el universo a la existencia. Esta palabra imparte poder; crea vida. Cada orden es una promesa; aceptada por la voluntad, recibida en el alma, trae consigo la vida del Ser infinito. Transforma la naturaleza y vuelve a crear el alma a imagen de Dios.
De igual modo se sostiene la vida así impartida. El ser humano vivirá de «toda palabra que sale de la boca de Dios» (Mat. 4: 4).
La mente, el alma, se nutre con lo que le sirvamos de alimento, y a nosotros nos toca decidir con qué nos alimentaremos. Todos tenemos la oportunidad de decidir en qué ocuparemos nuestra mente y cuáles pensamientos moldearán nuestro carácter. Dios dice de cada ser humano privilegiado con el acceso a las Escrituras: «Le escribí las grandezas de mi ley». «Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces» (Ose. 8: 12; Jer. 33: 3). […]
La Palabra de Dios, como el carácter de su Autor, presenta misterios que nunca podrán ser plenamente comprendidos por los seres finitos. Pero Dios ha dado en las Escrituras suficiente evidencia de su autoridad divina. Hay abundantes testimonios de la existencia de Dios, su carácter y la veracidad de su Palabra; estos testimonios apelan a nuestra razón e intelecto. Es cierto, él no ha eliminado la posibilidad de dudar; la fe debe apoyarse en la evidencia, no en la demostración; los que desean dudar tienen oportunidad de hacerlo, pero los que desean conocer la verdad tienen suficiente terreno para ejercer la fe.
El hecho de que no comprendamos todos los misterios divinos no justifica que dudemos de la Palabra de Dios. Fijémonos en la naturaleza, ella constantemente nos presenta maravillas que escapan a nuestra comprensión. ¿Nos ha de sorprender, entonces, encontrar también en el mundo espiritual misterios que no podamos sondear? La dificultad reside solamente en la estrechez y la debilidad de la mente humana.
Los misterios de la Biblia, lejos de ser un argumento contra ella, se encuentran entre las más contundentes pruebas de su inspiración divina.— La educación, caps. 13,18, pp. 114, 153-154.

Tomado de lecturas devocionales para Adultos 2017
DE VUELTA AL HOGAR
Por: Elena G. de White
#DeVueltaAlHogar #MeditacionesMatutinas #DevocionMatutinaParaAdultos #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian