lunes, 18 de marzo de 2013

GRAN LIGA DE GLOTONES


Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. Lucas 21:34

Jesucristo dijo que la glotonería o gula sería una de las señales del tiempo del fin. En la actualidad, la gula es, de hecho una diversión cuyos torneaos trasmite la cadena ESTM por televisión internacional.
Takeru Kobayafhi, famoso glotón japonés, fue campeón en concurso de comida durante seis años seguidos y el día 4 de julio de 2010 protagonizó una noticia sensacional que divulgaron diversos medios de comunicación.  Ese día se celebraba la competición anual Nathasn´s Hot Dog realizada en Conney Island. Lo malo era que Takeru Kobayafhi había sido excluido del concurso por una disputa con los dirigentes de la Major Leage Eating (“gran liga de comedores”, ¿o glotones?). 
De todos modos, Takeru Kobayafhi asistió al concurso, en el momento cumbre de la competición, su rival Joey Chesnut devoraba centenares de deliciosos perritos caliente y se dirigía hacia la victoria.  El excampeón no pudo soportar la escena.  De repente salió al escenario para comer.
Por supuesto, intervino la policía.  Intentaron arrestarlo por su conducta desordenada, pero Takeru Kobayafhi se opuso al arresto y entonces enfrentó graves cargos judiciales.  
Su mayor temor era que los descalificaran de por vida de los concursos de comida.
Al parecer, este incidente representa una de las características que definen a esta generación, del mismo modo que “comer y beber” fue una característica distintiva del mundo antediluviano.  La misma existencia de los concursos de comida indica una pérdida de equilibrio de la sociedad.  Unos de los resultados de “comer y beber” es la pérdida de sensibilidad espiritual para comprender los peligros de los últimos días.  Recuerda el consejo de Cristo al principio de la lectura de hoy.
La temperancia es otra forma de referirnos al dominio propio y no tiene que ver únicamente con la comida, sino con todos los ámbitos de nuestra vida.  El exceso en la comida, en el trabajo y otros aspectos, apunta a un problema de equilibrio en nuestro ser.
Ponte a pensar en tu propia vida.  ¿Existe algún tipo de desequilibrio en lo que haces?  Piensa cual es la razón por la que exageras en este o aquel ámbito de tu vida.  Ten cuidado, no seas que ganes el primer lugar en la final de la liga de glotones pero pierdas un lugar en el reino venidero. 

Tomado de Meditaciones Matutinas para jóvenes
¿Sabías que..? Relatos y anécdotas para jóvenes
Por Félix H. Cortez

No hay comentarios:

Publicar un comentario