miércoles, 4 de enero de 2012

MUCHO MÁS QUE UN VERSÍCULO PARA MEMORIZAR

«Me regocijaré en tus estatutos; no me olvidare de tus palabras» (Salmo 119:16)

Cuando de niño asistía a la Escuela Sabática, cada semana aprendía un versículo de memoria. Al final del trimestre, teníamos el sano orgullo de ser capaces de recitar los trece versículos, de memoria y sin cometer un error.
Memorizar la Palabra de Dios es una bendición magnífica porque conocer la Palabra de Dios:
  • Nos ayuda a obtener más beneficios del estudio de la Biblia.
  • Nos hace crecer espiritualmente.
  • Nos ayuda a estar conscientes de la presencia de Dios y adorarlo.
  • Nos ayuda a conocer sus preceptos y responder al llamamiento de Dios.
  • Nos ayuda a darnos cuenta de que la Palabra de Dios transforma la mente, a fin de que andemos en los caminos de Señor.
  • Nos abre a la acción del Espíritu Santo para que nos guíe con más poder
  • Nos inspira a orar más y a tener una relación. más íntima con Dios
  • Proporciona un conocimiento útil y efectivo de la Biblia.
  • Proporciona sabiduría práctica, guía y orientación para la vida.
  • Permite que Dios nos use de manera más poderosa.
  • Nos ayuda a compartir nuestra fe.
  • Ayuda a vencer el pecado y las tentaciones.
  • Proporciona confianza para dar testimonio.
  • Capacita para guiar a otros a la salvación.
  • Nos ayuda a animar a otros a crecer espiritualmente.
  • Ayuda a superar los problemas y los obstáculos de la vida.
  • Aumenta nuestro gozo y nuestra paz interior.
  • Ayuda a discernir las falsas doctrinas.
Hace años asistí a un seminario cuyo tema era «Cómo vivir una vida cristiana práctica». El orador nos enseñó la importancia de memorizar la Biblia, no solo un versículo de memoria cada día, como lo estamos haciendo en este libro de devoción, sino capítulos enteros.
Sugirió que comenzásemos con el primer capítulo de Santiago. Nunca imaginé que fuera capaz de hacer tal cosa, pero oré para que el Señor me ayudara. ¡Y lo hizo! Dedique media hora al día a memorizar las Escrituras, unos versículos cada día. No se desanime. Al final de la semana estará encantado con el resultado. (Basado en Mateo 4: 4)

Tomado de Meditaciones Matutinas
Tras sus huellas, El evangelio según Jesucristo
Por Richard O´Ffill

No hay comentarios:

Publicar un comentario