domingo, 6 de mayo de 2012

LA SEMILLA


«Después dijo Dios: "Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol que dé fruto según su especie, cuya semilla esté en él, sobre la tierra". Y fue así» (Génesis 1:11).

Hace un tiempo, a mi nieto le compré una maceta, una bolsa de tierra y varias semillas de girasol. Lo ayudé a poner las semillas en la tierra y luego esperamos unas semanas; pero no creció nada. ¿Cuál era el problema? ¿Las semillas estaban mal? ¿O quizá tan magros resultados tenían que ver con que se le olvidara regarlas y ponerlas al sol?
Piense en el gran potencial contenido en una pequeña semilla. Con tan solo un puñado de pepitas de manzana ya se puede hablar de la posibilidad de un manzanar entero.
«Cada semilla tiene en sí un poder germinador. En ella está encerrada la vida de la planta. Así hay vida en la Palabra de Dios. Cristo dice: "Las palabras que yo os he hablado, son espíritu, y son vida". "El que oye mi palabra, y cree al que me ha enviado, tiene vida eterna" (Juan 6:63; 5:24). En cada mandamiento y en cada promesa de la Palabra de Dios se halla el poder, la vida misma de Dios, por medio de los cuales pueden cumplirse el mandamiento y la promesa. Aquel que por la fe recibe la palabra, está recibiendo la misma vida y carácter de Dios. Cada semilla lleva fruto según su especie. Sembrad la semilla en las debidas condiciones, y desarrollará su propia vida en la planta. Recibid en el alma por la fe la incorruptible simiente de la Palabra, y producirá un carácter y una vida a la semejanza del carácter y la vida de Dios» (Palabras de vida del gran Maestro, pp. 19,20).
Hace unos años, en las profundidades de una pirámide de Egipto, se encontró una semilla. Se calculó que tenía unos tres mil años de antigüedad. Los arqueólogos la plantaron para ver si crecía y se reproducía... ¡y lo hizo!
La semilla de la Palabra esconde un asombroso potencial. Dios dice: «Así será mi palabra que sale de mi boca: no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero y será prosperada en aquello para lo cual la envié» (Isa. 55:11).
¿En su corazón vive y crece la semilla de la Palabra? Basado en Mateo 13:1-9

Tomado de Meditaciones Matutinas
Tras sus huellas, El evangelio según Jesucristo
Por Richard O´Ffill

No hay comentarios:

Publicar un comentario