«Dios hizo todo hermoso en su momento», Edesiastés 3: 11.
A pesar del tiempo que ha pasado desde la creación, podemos contemplar mucha belleza en la tierra. Al estudiar la naturaleza te darás cuenta de lo hermoso que hizo Dios al mundo.
A Louis Pasteur, el famoso científico francés descubridor de la vacuna antirrábica y el método para purificar la leche, le gustaba contemplar las maravillas de la creación. Cierto día estaba en su laboratorio, donde pasaba muchas horas; uno de sus estudiantes entró al lugar para hablar con él. Pero cuando vio al científico con la cabeza inclinada y las manos juntas, el joven pensó que oraba, así que esperó en silencio hasta que ya pudiera hablarle.
Los minutos pasaron y entonces Pasteur cambió de posición. Entonces el estudiante se dio cuenta que su maestro no estaba orando, sino que observaba atentamente algo con el microscopio.
- Maestro no quise interrumpirlo porque creí que estaba orando
- Dijo el joven
- Estás en lo correcto —respondió Pasteur—. Platicaba con el creador del universo y le agradecía todo lo que ha hecho por mí, pero el me hablaba mediante sus obras sobre la belleza que ha creado para el hombre. ¿No te parece maravilloso?
Dedica tiempo para ver la belleza que Dios hizo para ti. La encontrarás en las flores de diferentes formas y colores; en las aves, con sus trinos y plumajes característicos; en las estrellas, las colinas, los árboles, la sonrisa de un bebé. En fin, por dondequiera que mires, podrás ver todavía vestigios de la belleza original que Dios creó para que sus hijos e hijas fueran felices. Conéctate con Jesús para que puedas prepararte y gozar de la belleza sin igual que habrá en la tierra nueva, en el Edén restaurado.
Tomado de meditaciones matinales para menores
Conéctate con Jesús
Por Noemí Gil Gálvez
A pesar del tiempo que ha pasado desde la creación, podemos contemplar mucha belleza en la tierra. Al estudiar la naturaleza te darás cuenta de lo hermoso que hizo Dios al mundo.
A Louis Pasteur, el famoso científico francés descubridor de la vacuna antirrábica y el método para purificar la leche, le gustaba contemplar las maravillas de la creación. Cierto día estaba en su laboratorio, donde pasaba muchas horas; uno de sus estudiantes entró al lugar para hablar con él. Pero cuando vio al científico con la cabeza inclinada y las manos juntas, el joven pensó que oraba, así que esperó en silencio hasta que ya pudiera hablarle.
Los minutos pasaron y entonces Pasteur cambió de posición. Entonces el estudiante se dio cuenta que su maestro no estaba orando, sino que observaba atentamente algo con el microscopio.
- Maestro no quise interrumpirlo porque creí que estaba orando
- Dijo el joven
- Estás en lo correcto —respondió Pasteur—. Platicaba con el creador del universo y le agradecía todo lo que ha hecho por mí, pero el me hablaba mediante sus obras sobre la belleza que ha creado para el hombre. ¿No te parece maravilloso?
Dedica tiempo para ver la belleza que Dios hizo para ti. La encontrarás en las flores de diferentes formas y colores; en las aves, con sus trinos y plumajes característicos; en las estrellas, las colinas, los árboles, la sonrisa de un bebé. En fin, por dondequiera que mires, podrás ver todavía vestigios de la belleza original que Dios creó para que sus hijos e hijas fueran felices. Conéctate con Jesús para que puedas prepararte y gozar de la belleza sin igual que habrá en la tierra nueva, en el Edén restaurado.
Tomado de meditaciones matinales para menores
Conéctate con Jesús
Por Noemí Gil Gálvez
No hay comentarios:
Publicar un comentario