«El que confía en sus riquezas, caerá como hoja seca, pero los justos reverdecerán como las ramas» (Proverbios 11:28).
Caminemos hasta ese árbol. Mira ahora para arriba. ¡Qué alto! Fíjate en todas esas hojas verdes. Alguna vez te has preguntado cómo hacen las hojas para volverse verdes y permanecer hermosas? ¿Sabes de dónde viene su alimento? Pues todo lo que necesitan viene del suelo: la clorofila que les da su color, el agua que las mantiene saludables y el alimento que las mantiene fuertes. Otra pregunta: ¿Cómo hacen todas esas cosas para llegar del suelo a las hojas? A través de las raíces, obviamente. El alimento y el agua viajan a través de las raíces, suben por el tronco, llegan a las ramas y finalmente a las hojas. ¿No es asombroso?
¿Sabes cómo podemos hacer nosotros para crecer y ser cristianos saludables? A través de las raíces, obviamente. No son raíces como las del árbol, pero se les parecen mucho. Cada día necesitamos hablar con Dios en oración y leer sus mensajes en la Biblia. Cuando hagamos eso, Dios nos dará todo el alimento espiritual que necesitamos para convertirnos en unos seguidores de Jesús fuertes y saludables.
Abre hoy la Palabra de Dios y «echa raíces» profundas en él. Absorbe el «agua» de su salvación, y entonces crecerás en Jesús como crece un árbol.
Tomado de Devocionales para menores
Explorando con Jesús
Por Jim Feldbush