«Yo estoy llamando a la puerta; si alguien oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaremos juntos». Apocalipsis 3: 20
¿Cómo te sentirías si papá te dice que mañana comerá en tu casa alguien muy importante? Puede ser tu artista favorito o alguien a quien tú quieres mucho, o el presidente de tu país. Sí, amiguito, yo también estaría feliz.
Así se sintió Leví cuando Jesús fue a comer a su casa. Fue una fiesta muy hermosa. Él invitó a todos sus amigos para que aprendieran sobre el amor de Dios. Muchas personas asistieron a la fiesta y de esa forma Leví demostró su gratitud a Jesús por haberlo perdonado.
Pero había allí unos hombres a los que no les gustó que Jesús comiera con las personas que ellos consideraban malas. Jesús les dijo que él vino al mundo a buscar a esas personas y que él los amaba a todos.
¿Te gustaría que Jesús fuera a comer a tu casa? Al igual que Leví, puedes invitar a algunas personas a comer contigo. Al hacer esto, es como si lo hicieras a Jesús. Habla con tu mami y planifiquen la comida. Será de mucha bendición.
Oración: Querido Jesús, quiero que tú seas siempre mi invitado especial.
Pasito a pasito, Crezco y aprendo
¡Vive y crece sanamente!
Por: Kathy Hernández de Polanco
#ViveYCreceSanamente #MeditacionesMatutinas #DevociónMatutinaParaPreescolares #vigorespiritual #plenitudespiritual #FliaHernándezQuitian #MiBibliaDice #DiosEscucha #SeñorTransfórmame