«Examíname, oh Señor, y pruébame; escudriña mi mente y mi corazón» (Salmo 26:2, BLA)
Hoy vamos a ir de aventura a otro lugar del cuerpo, ¿Sabes qué parte del cuerpo es la que te permite caminar? Si has respondido que los pies o las piernas, has acertado a medias. Esas son obviamente partes del cuerpo que te ayudan a caminar, pero la parte del cuerpo a la que me refiero hoy es a tu cerebro. ¿Sabías que tu cerebro te ayuda a caminar? De hecho, el cerebro te ayuda en todo lo que haces.
Si estás caminando y encuentras una subida, el cerebro se lo dice tus pies y los ayuda a dar el siguiente paso correctamente para que no te caigas. Si necesitas saltar una corriente de agua mientras estás caminando, tu cerebro ayuda a tus pies a saber cuán fuerte y lejos deben saltar
Tu cerebro es asombroso, pero también puede hacer que hagas cosas malas. La Biblia dice que nuestras mentes no quieren seguir a Dios. Tenemos que permanecer cerca de él para que su Espíritu Santo pueda controlar nuestros pensamientos y ayudarnos a hacer lo correcto. Pídele a Dios que examine tu mente como lo hizo David en el versículo de hoy. Él te ayudará a pensar en cosas que te ayudarán a vivir para Jesús.
Tomado de Devocionales para menores
Explorando con Jesús
Por Jim Feldbush