jueves, 6 de octubre de 2011

CONSTRUYENDO EL CARÁCTER - 3ª PARTE

Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová. (Génesis 6:18).

«Gracia» es una palabra muy utilizada en la Biblia para hacer referencia al favor divino. De Ester, la joven sencilla y humilde que llegó a ser reina de Persia, se dice que halló «gracia». José, el hijo mimado, el esclavo que se convirtió en gobernador de Egipto, también halló «gracia». Jesús, el Dios Eterno, el humilde bebé que dormía en un pesebre, también halló «gracia». ¿Por qué estos y otros personajes bíblicos hallaron «gracia» ante los hombres y especialmente, ante Dios? Porque la sencillez y la humildad caracterizaron sus vidas, preparándolos para el triunfo.
Entre los materiales que podemos emplear para la construcción de un carácter sólido y equilibrado no debe figurar nunca el orgullo. Desde bien pequeño, el niño debe ser instruido en el amor para contrarrestar la naturaleza pecaminosa con la que nace, que lo conducirá siempre hacia el egoísmo. Si se le complace cada capricho, de adulto será orgulloso y estará desprovisto de la «gracia» divina. Nabucodonosor es un ejemplo de esas personas que sucumben ante el orgullo. Su notable victoria le había dado la supremacía política, pero al mismo tiempo le había hecho caer en el más hondo abismo, hasta convertirse en un animal.
Debemos revisar cuidadosamente cada tabla que utilizamos para la construcción de nuestro carácter. Los insectos que destruyen incluso los árboles más robustos suelen trabajar por dentro. Así sucede con nuestro carácter. El enemigo pone en nuestro camino minúsculos insectos aparentemente inofensivos que destruyen la más colosal edificación. Pero Dios ha creado un insecticida contra esas plagas: el amor. El amor no deja que el odio, la envidia, ni los celos, entren en tu vida. Esa es la «gracia» de Dios morando en el corazón humano. Si aceptamos esa gracia, podremos construir un carácter sólido, y mantenernos firmes ante las acechanzas de Satanás.
Acude a Cristo. Él quiere y puede cambiar los rasgos negativos de carácter que has heredado de tus antepasados. No tienes excusa para no abandonarlos. El poder está en Jesús. ¡Tómalo!
Hay poder en el nombre de aquel que vivió en medio del pecado y no pecó.

Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera

RESPETAR EL NOMBRE DE DIOS

No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano. Éxodo 20:7.

¿Crees que el nombre de una persona tiene importancia? Para los padres de un recién nacido lo tiene, porque de eso dependerá cómo lo llamarán el resto de la vida. Pero más allá de lo que sientan los padres en el momento de elegir un nombre para su hijo, actualmente y en términos generales los nombres carecen de importancia. Reflexiona un momento: ¿Cambiaría en algo para ti si la marca de zapatillas Nike fuera Kine? ¿O si la marca de computadoras Apple fuera Orange? ¿O si los autos BMW fueran SMH? Si las zapatillas Nike no existieran y Kine tuviera la misma calidad y la excelencia en sus productos, todos los deportistas calzarían Kine sin importar el nombre.
Sin embargo, a diferencia de las marcas y los nombres actuales, en las Escrituras los nombres tenían mucho valor, y casi todos llevaban un significado. Esos nombres revelaban algún rasgo del carácter del individuo, su aspecto personal, su ascendencia familiar o el dios al que servían sus padres.
Por eso encontramos nombres como Eva, que significa madre de todos los vivientes; Set, sustitución; Sara, princesa; Isaac, risa; David, muy amado; Elías, mi Dios es Jehová; Daniel, Dios es mi juez; y Ananías, Jehová cubre.
Los nombres de la Biblia que hacen alusión a Dios también presentan algún aspecto de su carácter o su persona. Esos nombres son sumamente sagrados y santos, y el Rey del universo ordena a todos los mortales que no jueguen con su nombre. Cuando usamos el nombre de Dios sin sentido alguno, o con un sentido falaz o sacrílego, para hacer un chiste, violamos el tercer mandamiento.
Su Palabra muestra una cantidad de nombres referidos al mismo Dios. Por ejemplo: Jehová, Señor, Dios, Eterno, Padre, Emanuel y otros más. También Jesús y el Espíritu Santo reciben diferentes nombres que hacen mención a su carácter o a sus actividades a favor de la salvación humana.
Desde su rebelión, Satanás ha tratado de manchar y arruinar a Dios y su reputación. Luego transmitió esta intención a los seres humanos pecaminosos. La Biblia, como Palabra de Dios, trata de poner un freno a este pecado y apela al entendimiento para que cada criatura respete y honre el nombre de su Creador.
Al orar por la compañía divina en las actividades de hoy, exalta y glorifica el nombre que está sobre todo nombre.

Tomado de meditaciones matinales para jóvenes
Encuentros con Jesús
Por David Brizuel

SIMPLEMENTE, VE Y VENCE

Ahora sea notorio al rey, que si aquella ciudad fuere reedificada, y los muros fueren levantados, no pagarán tributo, impuesto y rentas, y el erario de los reyes será menoscabado. Esdras 4:13.

¡Exactamente ahora, que las cosas comenzaban a encajarse y que todo parecía ir bien, tenía que suceder! Ana Beatriz era una batalladora, que se levantaba temprano, a fin de dejar todo listo para los hijos y salir a trabajar. Luchaba movida por el sueño de ver a sus hijos graduados. Abandonada por el esposo, hacía las veces de padre y de madre de dos lindos niños. Por eso, la noticia no podría ser peor.
Después de mucho tiempo, cambiando constantemente de empleo, ahora trabajaba en una gran empresa, y progresaba en el aspecto profesional. Todos la apreciaban, desde los empleados más llanos hasta la Administración. Era un ejemplo de lucha, y no conocía la palabra desánimo. Pero, en ese momento las cosas eran diferentes. El diagnóstico era terrible: cáncer. Sumergida en lágrimas, se preguntaba: ¿Por qué ahora?
El pueblo de Israel pasaba por la misma situación. Después de setenta años de esclavitud, lejos de casa, era hora de volver. Ellos no solo tenían el permiso del Rey sino también su apoyo financiero, para ejecutar la obra. Había alegría entre el pueblo, y música en los corazones. Las personas se abrazaban y cantaban por la victoria alcanzada. Pero de repente, el cielo se volvió oscuro.
Los pueblos de aquella región vieron la alegría del pueblo, y acabaron con ella. Escribieron una carta al rey, acusando a Israel de rebeldía y de sedición. Y el rey les creyó.
¿Qué relación tiene eso contigo? Estás comenzando un nuevo día, y probablemente tienes mucho que hacer, luchas que enfrentar, victorias que conquistar. El enemigo sabe de eso, y hará lo que pueda por lanzar agua helada sobre todo tu entusiasmo: puede ser una enfermedad inesperada, una mentira maliciosa, la pérdida del empleo o el término de una relación amorosa; no lo sé. La verdad es que el enemigo quiere desanimarte, destruirte y arrojarte al piso.
Hoy, al salir de casa, sal con la seguridad de que, aunque el enemigo te asecha, Dios tiene poder para protegerte. Levántate, y sal de tu casa con la seguridad de la victoria en Cristo. No te asustes por causa de las mentiras que inventen respecto de ti: "Ahora sea notorio al rey, que si aquella ciudad fuere reedificada, y los muros fueren levantados, no pagarán tributo, impuesto y rentas, y el erario de los reyes será menoscabado".

Tomado de meditaciones matinales para adultos
Plenitud en Cristo
Por Alejandro Bullón