«Que se disuelvan, como babosa rastrera» (Salmo 58:8, NVI).
Las babosas son unos animalitos pequeños y blandos con forma de gusano que viven en lugares oscuros y húmedos como el jardín. Se esconden bajo las piedras y las hojas caídas. El motivo por el que buscan lugares húmedos es porque están hechas prácticamente de agua. Si se calientan mucho, el agua comienza a abandonar su cuerpo y pueden morir. El versículo de hoy habla de esto. Cuando dice que la babosa «se disuelve», se refiere a que el calor está secando el agua que hay en su cuerpo.
Esto de la babosa que se disuelve lentamente puede sonar un poco triste. De lo que está hablando realmente el versículo es de las personas que no quieren amar a Dios. De manera lenta pero segura estas personas se van «disolviendo» con el pecado a medida que se van apartando de Dios. El calor abrasador del mundo de Satanás les extrae la vida y el amor que llevan por dentro.
Dios quiere que vivamos bajo la luz de su amor y quiere bendecirnos en abundancia. Mejor aún, él quiere darnos todo su amor gratuitamente. No seas como una babosa alejándote de Dios. Corre hoy hacia él y deja que te llene de vida eterna.
Tomado de Devocionales para menores
Explorando con Jesús
Por Jim Feldbush