«Ella los había hecho subir a la azotea, y estaban allí escondidos, entre unos manojos de lino puestos a secar» (Josué 2:6).
¿Alguna vez has jugado a los espías? Yo sí, y a mis hijos les encanta. Esconderse detrás de una pared, hablar por radios portátiles, y esconderse del enemigo invisible es muy divertido. En el versículo de hoy los espías eran de verdad. Dios los había enviado a la Tierra Prometida para que la exploraran. Al poco tiempo, alguien los estaba siguiendo, así que corrieron a la casa de una mujer y le pidieron que los escondiera. Ella los llevó al techo y los cubrió con lino.
El lino es una planta que puede llegar a medir casi un metro y medio de alto. Hoy en día, la gente hace ropa con ella. Así como lo oyes, hacen ropa con una planta. Del lino se producen camisas, pantalones y manteles muy finos y duraderos.
Mateo 6:28,29 dice que ni Salomón estaba tan hermosamente vestido como los lirios del campo. Jesús quería decir que no debemos preocuparnos por nuestra ropa. Si Dios puede enseñarle a la gente cómo hacer ropa con lino, y si cubrió a sus espías con él, debemos estar tranquilos. Dios cuida de nosotros y nos cubre con el mejor traje de todos: ¡su manto de justicia!
Tomado de Devocionales para menores
Explorando con Jesús
Por Jim Feldbush