Entonces bendijo Dios el séptimo día y lo santificó, porque en el reposo de todas la obra que había hecho en la creación. (Génesis 2:1).
5e considera que la luna de miel es el cimiento del matrimonio. Las estadísticas aseguran que un porcentaje muy elevado de parejas que programan con esmero esta ocasión especial están garantizando la solidez y durabilidad de su edificio emocional y afectivo.
Después de haber creado a la primera pareja, Dios descanso y bendijo el siguiente día convirtiéndolo en una luna de miel. Ahora, todas las criaturas podrían disfrutar de tan magistral obra. Adán y Eva, junto a su Dios, contemplaban cada detalle, y se sentían felices. De igual forma, el Señor ha conservado ese día para que siga proporcionando felicidad al ser humano.
Si cada semana hiciéramos planes para disfrutar de esa «luna de miel» que Dios nos regala tendríamos un buen cimiento sobre el que edificar durante los seis días restantes de arduo trabajo. Nada podrá destruir nuestra vida si nuestro fundamento es Dios, el Creador del cielo y de la tierra. El sábado, día de reposo, adoración y alabanza, es el preámbulo del descanso que hallaremos en los brazos amorosos de nuestro Señor, la antesala de la vida que obtendremos en el reino eterno.
La Biblia llama dichoso al hombre que guarda el sábado sin profanarlo (ver Isa. 56: 2). Su promesa invariable es: «Si retraes del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamas "delicia", "santo", "glorioso de Jehová", y lo veneras, no andando en tus propios caminos ni buscando tu voluntad ni hablando ms propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová. Yo te hare subir sobre las alturas de la tierra y te daré a comer la heredad de tu padre Jacob. La boca de jehová lo ha hablado» (Isa. 58: 13, 14).
Siendo que durante la semana la vida nos impone una carga muy pesada, es maravilloso saber que podemos encontrar un remanso de paz lejos de los afanes comunes, dedicado al servicio, al júbilo, a la adoración y al amor. ¿No has experimentado todavía esa «luna de miel»? Te invito a que esta semana hagas planes para experimentarla, y veras cambios en tu vida.
Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera
5e considera que la luna de miel es el cimiento del matrimonio. Las estadísticas aseguran que un porcentaje muy elevado de parejas que programan con esmero esta ocasión especial están garantizando la solidez y durabilidad de su edificio emocional y afectivo.
Después de haber creado a la primera pareja, Dios descanso y bendijo el siguiente día convirtiéndolo en una luna de miel. Ahora, todas las criaturas podrían disfrutar de tan magistral obra. Adán y Eva, junto a su Dios, contemplaban cada detalle, y se sentían felices. De igual forma, el Señor ha conservado ese día para que siga proporcionando felicidad al ser humano.
Si cada semana hiciéramos planes para disfrutar de esa «luna de miel» que Dios nos regala tendríamos un buen cimiento sobre el que edificar durante los seis días restantes de arduo trabajo. Nada podrá destruir nuestra vida si nuestro fundamento es Dios, el Creador del cielo y de la tierra. El sábado, día de reposo, adoración y alabanza, es el preámbulo del descanso que hallaremos en los brazos amorosos de nuestro Señor, la antesala de la vida que obtendremos en el reino eterno.
La Biblia llama dichoso al hombre que guarda el sábado sin profanarlo (ver Isa. 56: 2). Su promesa invariable es: «Si retraes del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamas "delicia", "santo", "glorioso de Jehová", y lo veneras, no andando en tus propios caminos ni buscando tu voluntad ni hablando ms propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová. Yo te hare subir sobre las alturas de la tierra y te daré a comer la heredad de tu padre Jacob. La boca de jehová lo ha hablado» (Isa. 58: 13, 14).
Siendo que durante la semana la vida nos impone una carga muy pesada, es maravilloso saber que podemos encontrar un remanso de paz lejos de los afanes comunes, dedicado al servicio, al júbilo, a la adoración y al amor. ¿No has experimentado todavía esa «luna de miel»? Te invito a que esta semana hagas planes para experimentarla, y veras cambios en tu vida.
Tomado de meditaciones matutinas para mujeres
De la Mano del Señor
Por Ruth Herrera