Tu Oración: Querido Dios, gracias por el césped verde, que alegra mis ojos y sobre el que puedo jugar.
Versículo para hoy: “En verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce”. Salmos 23:2.
¡Qué lindo es el césped! En el césped puedes jugar con tus amigos; acostarte para calentarte al sol; sentarte para conversar o comer con tu familia; recostarte y leer… Además, alegra nuestra vista. Dios lo hizo de color verde porque así nos ayuda a sentirnos bien.
Un poquito de ciencia
Para esto necesitas que mamá o papá te consigan semillas de césped, tierra, una bandeja para sembrar, una regadera para plantas con agua y una varilla. Cubre la bandeja con la tierra y humedécela un poco con agua. Usa el lápiz para formar surcos con las letras de tu nombre; si no cabe, puedes trazar tus iniciales. Con cuidado esparce las semillas de césped en los surcos que marcaste. Cubre las semillas con una delgada capa de tierra y humedécelas con la regadera.
Coloca la bandeja en un lugar donde reciba la luz directa del sol. Con ayuda de la regadera, humedece levemente la tierra una o dos veces al día. Lo que hayas escrito aparecerá a los diez días de haber sembrado las semillas.
Devoción matutina para niños pequeños 2016
Pequeños científicos de Dios
Por: Cesia Alvarado Zemleduch
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