«Haz una placa de oro puro, y graba en ella, como si fuera un sello, las palabras “Consagrado al Señor”». Éxodo 28: 36
¡Hola! Hoy te quiero enseñar otra palabra nueva. Tal vez has oído hablar de la «consagración», y quizás has escuchado a tus padres o a algún adulto decir que «tenemos que ser consagrados». ¿Qué significa esta palabra tan larga?
Consagrado es lo mismo que dedicado. Cuando apartas algo para un uso especial estás consagrando eso. Por ejemplo, tu pelota está consagrada para el deporte y tu toalla está consagrada para secarte cuando sales del baño.
En la Biblia, cuando una persona se dedica a Jesús, se dice que esa persona está consagrada, o sea, que le pertenece a Dios y es su tesoro especial. ¡Qué lindo sería si todos los niños como tú fueran dedicados especialmente para Dios! De la misma manera como cuidas tu pelota dedicada al deporte, Jesús también cuida a las personas consagradas que se dedican a él. Tú puedes también dedicar tu vida a Jesús, él te cuidará y serás una persona muy especial
Oremos: Querido Jesús, ayúdame a ser especialmente tuyo.
Quiero ser tu tesoro especial. Amen.
Pasito a pasito, Crezco y aprendo
¡Vive y crece sanamente!
Por: Kathy Hernández de Polanco
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