Lugar: Malasia
Palabra de Dios: Colosenses 2:6, 7
Quieres ver un árbol gigante, viaja a Malasia. Allí, encontrarás lo que se conoce como el árbol baniano o higuera de Bengala (también se encuentra en otras partes del Asia tropical).
El baniano es un árbol que puede crecer hasta unos 30 metros de altura; pero eso no es lo que lo hace tan enorme. El árbol también suele crecer hacia los costados, y puede seguir creciendo y creciendo. De hecho, un solo árbol baniano puede tener una circunferencia de 450 metros.
¿Cómo hace esto el baniano? La respuesta está en su sistema de raíces aéreas, raíces que crecen por encima de la superficie. Las raíces se desarrollan desde debajo de las ramas y se abren camino hacia el suelo. Esto le da al árbol una buena estructura de apoyo, y también le proporciona el agua y los nutrientes que necesita.
Eventualmente, las raíces nuevas forman nuevos troncos, con ramas nuevas. Entonces, las raíces aéreas crecen de ramas nuevas, y el árbol sigue expandiéndose hacia los lados, a medida que el ciclo continúa. Si alguna vez te encuentras con lo que parece un gran matorral de árboles, no te dejes engañar: puedes estar viendo un solo árbol.
Como sabes, tener un buen sistema dé raíces es muy importante para un árbol así de grande. Sin los nutrientes y el apoyo que dan las raíces, el árbol no podría seguir creciendo.
Ocurre lo mismo con nosotros. Para poder crecer espiritualmente necesitamos tener raíces fuertes, que nos den un buen apoyo y nutrición. Necesitamos estar arraigados en Cristo, pasar tiempo con él, amarlo y depender de él para todo. Así que, sigue el consejo del apóstol Pablo: "Por eso, de la manera que recibieron a Cristo Jesús como Señor, están ahora en él, arraigados y edificados en él, confirmados en la fe como se les enseñó, y llenos de gratitud".
Tomado de Devocionales para menores
En algún lugar del mundo
Por Helen Lee Robinson